Londres, 5 nov (EFE).- Brasil expondrá en la reunión que el G-20
celebrará en los próximos dos días en Saint Andrew (Escocia) el
problema del desequilibrio del flujo de capitales causado por los
estímulos económicos aplicados por los países para frenar la crisis.
En declaraciones a EFE, el ministro brasileño de Hacienda, Guido
Mantega, confirmó hoy que planteará esa cuestión en el encuentro con
sus colegas del G-20 (grupo de países ricos y emergentes).
"Tenemos ahora un desequilibrio de flujos de capitales, porque
estamos viviendo un periodo pos-crisis donde se creó un volumen de
liquidez muy grande en los mercados internacionales", explicó el
ministro.
"Los gobiernos -explicó- tuvieron que poner mucha liquidez, y esa
liquidez en dólares no tiene oportunidades de rentabilidad. La
rentabilidad es muy baja".
"Entonces hay un tendencia contra los países que están creciendo
más, que tienen bolsas con materias primas. Es el caso de Brasil,
Australia, Nueva Zelanda, Sudáfrica...", indicó Mantega, que
participó en un seminario sobre oportunidades de inversión en su
país, organizado en Londres por el diario "Financial Times".
"Nosotros -insistió- estamos con un problema de exceso de
revalorización de la moneda. Y otros países tienen una devaluación
que es conveniente para ellos, como China o EEUU, que está con el
dólar muy bajo. Esto está creando problemas".
Mantega recordó que Brasil tuvo que "imponer una tarifa (del 2
por ciento) para la entrada de capital extranjero para aplicaciones
en las bolsas de valores y en renta fija. Eso fue para disminuir el
apetito, impedir que se crease una burbuja que podría traer
problemas".
"Ése -reiteró- será uno de los temas principales de discusión del
G-20. En las cuestiones cambiarias tenemos que trabajar en
conjunto".
"No queremos perjudicar a la industria manufacturera brasileña.
Ésta va a sufrir si hay un desequilibrio muy grande con el valor de
las monedas", apuntó el titular del ramo.
Aparte de ese asunto, Mantega comentó que otro de los
"principales temas de la agenda" será "el intento de reducir los
desequilibrios entre los países que tienen un superávit comercial
más alto, entre los que tienen más reservas y los que tienen menos".
Según el responsable gubernamental, el G-20 acordó en reuniones
previas que "deberíamos disminuir esas desigualdades. Estamos todos
de acuerdo. Eso significa que China tiene que estimular el consumo
interno, tener menos superávit comercial. Y Brasil, también".
Preguntado si es necesario mantener los estímulos fiscales
puestos en marcha para hacer frente a la crisis, Mantega respondió
que "en los países avanzados hay que mantener los estímulos, porque
el crecimiento aún no se consolidó".
"En Brasil, (el crecimiento) ya se consolidó y podemos empezar a
disminuir los estímulos fiscales. Y estaremos disminuyéndolos el
próximo año", dijo el titular de Hacienda, que predijo un
crecimiento de la economía brasileña del 1,2 por ciento para 2009 y
del 5 por ciento para 2010.
El ministro cree que "para los países europeos que aún están con
tasas negativas (de crecimiento), e incluso para los EEUU, es
preciso que continúen con los estímulos hasta que haya una reducción
del desempleo, y una consolidación del crecimiento".
Los ministros de Finanzas y gobernadores de bancos centrales del
G-20 se reúnen desde mañana hasta el sábado en Saint Andrews con la
misión de profundizar en las medidas acordadas en la pasada cumbre
de Pittsburgh (EEUU) para afianzar la recuperación económica. EFE