Brasilia, 16 jun (EFE).- Los Gobiernos de Brasil y de Perú
fortalecieron hoy la integración regional con la firma de acuerdos
bilaterales en diversas áreas pero con énfasis en la energía,
durante un encuentro presidencial en la ciudad de Manaos.
La breve cita en Manaos, capital del estado brasileño de
Amazonas, sirvió además para que los presidentes de Brasil, Luiz
Inácio Lula da Silva, y de Perú, Alan García, renovaran su
compromiso con el desarrollo de sus países.
"Ha sido una de nuestras reuniones más productivas y más
intensas, porque hemos abordado temas muy concretos y porque tocamos
problemas para resolver y favorecer de inmediato a nuestros
pueblos", manifestó García en una rueda de prensa conjunta con Lula
después del encuentro.
El mandatario peruano llegó hoy a Manaos donde permaneció unas
pocas horas, tiempo suficiente para entrevistarse con Lula antes de
asistir juntos a una reunión con los integrantes del Consejo
Empresarial Brasil-Perú.
Durante la cita en Manaos los dos Gobiernos firmaron una serie de
acuerdos y documentos complementarios en las áreas de cooperación
científica y técnica, ordenamiento territorial e integración
fronteriza, producción agrícola y gestión integrada de los recursos
hídricos.
También se suscribieron acuerdos para la transferencia de
tecnología brasileña en sistemas agrícolas y forestales a
comunidades fronterizas peruanas.
"Vamos a dar pasos seguros y concretos en el camino de la
integración energética, en la utilización de los recursos gasíferos
del Perú, en la integración de nuestros pueblos fronterizos, en el
uso de nuestras monedas (real y nuevo sol) en el comercio y
concluyendo viejos sueños como las carreteras interoceánicas que
unen al Perú con Brasil", apuntó García.
El gobernante peruano destacó los acuerdos alcanzados en el
sector energético, que tienen "un gran potencial para los dos
países" y, según dijo, se pueden desarrollar sin "dañar el medio
ambiente".
El mayor proyecto conjunto en el área energética es el llamado
"Gasoducto del Sur del Perú", que se pretende construir entre las
regiones de Cuzco, Arequipa, Puno, Moquegua y Tacna para aprovechar
las enormes reservas de gas del país andino, que están calculadas en
unos 15 trillones de pies cúbicos.
En ese proyecto, que ha generado polémicas en algunos sectores
sociales y políticos peruanos, participará la constructora brasileña
Odebrecht.
De otro lado, Lula destacó que en este segundo Gobierno de García
ya ha tenido con él ocho encuentros para tratar asuntos bilaterales.
"Puedo afirmar que Brasil y Perú no tuvieron en el siglo pasado,
en los últimos cincuenta años, una cantidad de encuentros como la
que estamos teniendo ahora", afirmó Lula, quien instó a los
empresarios de ambos países a aprovechar las facilidades de
intercambio comercial abiertas con los acuerdos.
"Los empresarios no cambian a cada cuatro, cinco u ocho años como
los Gobiernos, los empresarios siguen los mismos durante varios
Gobiernos", expresó el presidente brasileño.
La relación comercial entre Brasil y Perú ha registrado un fuerte
repunte entre 2003 y 2008, período en el que el intercambio de
bienes y servicios pasó de 724 millones de dólares a 3.300 millones
de dólares.
Aunque el comercio bilateral tuvo una caída en 2009, como
consecuencia de la crisis mundial, este año ha sumado 766 millones
de dólares sólo en el primer cuatrimestre, por lo que se calcula que
llegará a diciembre con cifras similares a las del año pasado.
"La balanza, reconozco, favorece a Brasil, pero de lo que se
trata es de conseguir un equilibrio que alcanzaremos con más ventas
de lado y lado", resaltó Lula, quien criticó las normas "absurdas"
que todavía existen en Brasil para regular el comercio con sus
vecinos. EFE
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