México, 24 may (EFE).- Los pequeños hurtos, conocidos como "robo
hormiga", dejan pérdidas de hasta 100 millones de dólares anuales a
las cadenas comerciales de México y merman entre un 30% y 35% las
utilidades netas de los grandes corporativos, informó hoy el Grupo
Multisistemas de Seguridad Industrial.
El presidente de ese grupo, Alejandro Desfassiaux, aseguró en un
comunicado que el "robo hormiga" disminuye hasta en un 10% los
inventarios de las compañías y, en la mayoría de los casos, es un
delito cometido por los mismos trabajadores, visitantes o
proveedores, "lo que dificulta la detección oportuna".
Según esta firma, entre los sectores más vulnerables al "robo
hormiga" se encuentran los establecimientos comerciales, los
fabricantes de comestibles, de pequeños insumos y las empresas que
manejan mucha información de clientes, como bancos, servicios
financieros y telefonía.
"En 80% de los casos se realiza por los propios empleados, que
pueden incurrir en (otros) delitos diversos como robo de secretos o
propiedad intelectual, chantaje, coerción, soborno, amenazas,
vigilancia electrónica", señaló Desfassiaux.
Precisó que este tipo de robo (generalmente de pequeñas
cantidades o mercancías de bajo precio) es más perceptible en
empresas de bienes, como las tiendas de autoservicio y
departamentales.
Mientras en las firmas de servicios, como telefonía celular, se
presentan más casos de transferencia de clientes y venta de bases de
datos, indicó.
"La información puede llegar a representar para algunas firmas
más de 70 por ciento de su valor, lo que la convierte en uno de los
principales activos con los que cuenta la empresa", dice
Desfassiaux.
Agregó que los casos de espionaje, robo de información e
infiltración de sistemas administrativos y de gestión son ya tan
comunes en México que incluso grandes empresas, implementaron
medidas para proteger sus fórmulas y proyectos de los intrusos.
Asimismo, destacó que "el costo del espionaje industrial es muy
alto. Además de pérdidas económicas, al hacerlo público la compañía
pierde reputación y se muestra vulnerable y no confiable".
Por otra parte, Desfassiaux indicó que otro problema que afrontan
las empresas es la deslealtad de algunos empleados debido a que es
un personal que conoce hábitos, horarios y grado de vulnerabilidad
de los empresarios, "información que puede usar en forma indebida".
Por este motivo, los especialistas en seguridad recomiendan
mejorar las prácticas de seguridad dentro de las empresas y en la
gestión del capital humano. EFE