Berlín, 5 nov (EFE).- El nuevo gobierno de centro-derecha de la
canciller alemana Angela Merkel recibió hoy un mazazo a sus planes
de impulsar la economía con rebajas fiscales, al anunciar las
previsiones sobre la recaudación fiscal un retroceso de los ingresos
tanto en éste como en el próximo año.
Según las estimaciones que realiza dos veces al año un grupo de
expertos de ministerios y otras entidades económicas, el Estado y
las administraciones públicas ingresarán este año unos 524.100
millones de euros por impuestos, un 6,6 por ciento menos que en
2008.
Para 2010 se cuenta con un total de ingresos de 511.500 millones
de euros, lo que constituye una caída del 2,4 por ciento respecto a
este año.
El retroceso de los ingresos obstaculiza los planes del gobierno
de cristianodemócratas, socialcristianos bávaros y liberales de
reducir la carga fiscal.
El objetivo del nuevo gobierno de Merkel es reducir en los
próximos años la carga fiscal en unos 24.000 millones de euros
anuales, mediante rebajas impositivas, ayudas a la familias e
incentivos fiscales.
Con estas medidas, Merkel quiere impulsar el consumo interno como
instrumento para combatir la crisis económica y financiera.
El problema es que al mismo tiempo, el ministro de Finanzas,
Wolfgang Schäuble, se ha propuesto evitar que el endeudamiento se
dispare más allá de la ya de por sí histórica marca de 86.000
millones de euros presupuestados para 2010.
Los expertos constataron hoy que la única forma de evitar un
mayor déficit y posibilitar a la vez una rebaja fiscal es flanquear
las medidas con un recorte de gastos, lo que, a su vez, según los
economistas sería en estos momentos pernicioso para la coyuntura.
EFE