Caracas, 11 ene (EFE).- El comercio venezolano amaneció hoy en
calma tras un fin de semana de compras nerviosas, especialmente de
electrodomésticos, electrónica y de computación, por el anuncio
oficial de una fuerte devaluación del bolívar, la moneda local.
Hoy entró en vigor una reforma cambiaria, anunciada por el
Gobierno la noche del viernes, que estableció un cambio dual de 2,60
y 4,30 bolívares por dólar, con una devaluación de un 20,9 y 100 por
ciento respecto a la anterior tasa única de 2,15 bolívares por
divisa.
Los locales comerciales en Caracas operaban con normalidad esta
mañana y sus gerentes dijeron a Efe que de momento descartaban
ajustar sus precios al alza como consecuencia de la devaluación.
En los supermercados del este de la capital venezolana se
apreciaba en la mañana una afluencia normal, en una fecha de
reinicio formal de las actividades escolares y económicas tras el
asueto navideño.
En el municipio caraqueño de Chacao, los gerentes de almacenes de
alimentos aseguraban que no iban a subir precios, al menos hasta la
liquidación de las actuales existencias.
Se podía observar, no obstante, algunas colas en tiendas de
electrodomésticos y material informático que anunciaban ofertas por
las habituales rebajas de enero.
Otras tiendas del sector permanecían hoy cerradas por inventario.
El temor a subidas de precios llevó a los caraqueños a abarrotar
los pasados sábado y domingo las tiendas de electrodomésticos,
equipos electrónicos y computación, para aprovechar lo que podrían
ser los últimos precios de esas importaciones con la ya extinta tasa
de 2,15 bolívares por dólar.
El presidente venezolano, Hugo Chávez, amenazó el domingo con
expropiar los comercios que incurran en especulación, e hizo un
llamado a los militares y al pueblo organizado a vigilar e impedir
el alza de los precios.
Chávez ha dicho que el "ajuste" cambiario no debe implicar un
aumento de los precios, y en ese sentido, el ministro de Comercio,
Eduardo Samán, anunció que desde hoy el organismo de protección al
consumidor Indepabis comenzará una exhaustiva fiscalización para
evitar la especulación.
Por su parte, analistas privados coincidieron en que la
devaluación impactará de forma importante la inflación, debido a la
alta dependencia de las importaciones de todos los sectores
comerciales e industriales de este país petrolero.
El ex directivo del Banco Central de Venezuela (BCV-emisor)
Domingo Maza Zavala dijo este lunes a medios locales que la
devaluación agregará entre "un 20 y 25 por ciento" a la inflación
calculada para este año, por lo que el crecimiento de los precios
"sería más o menos del 50 en total" en 2010. EFE
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