Bruselas, 19 nov (EFE).- La Comisión Europea (CE) confirmó hoy el
envío de un pliego de cargos a la agencia de calificación de riesgo
Standard & Poor's (S&P), división de la estadounidense McGraw-Hill,
por un posible abuso de posición dominante en la gestión en EEUU del
código ISIN que designa a los valores financieros.
La CE investiga si existe una posible violación de las normas
comunitarias por que S&P obligue a las instituciones financieras
(como bancos o fondos de inversión) a pagar un canon de licencia por
el uso de los códigos ISIN estadounidenses en sus bases de datos.
Mientras que estas agencias en Europa informan de estos códigos
gratuitamente, S&P impone un gasto extra por ellos, un cargo que "no
tiene justificación", apuntó el portavoz de Competencia de la CE,
Jonathan Todd.
El código ISIN es un estándar desarrollado por la Organización
Internacional de Estandarización para ofrecer una identificación
internacional a títulos (como acciones y bonos) emitidos por todo el
mundo.
S&P gestiona el sistema ISIN en Estados Unidos (CSB) a cuenta de
la Asociación de Bancos de ese país (ABA).
Por ello, S&P/CSB es la única que emite este código en el mercado
estadounidense y el único operador que recibe información de primera
mano de todas las entidades que emiten títulos en EEUU.
S&P/CSB incluye la información recolectada por los emisores de
los valores en una base de datos descriptiva que luego se licencia a
las empresas proveedoras de servicios financieros (como Bloomberg,
por ejemplo).
Los pliegos de cargos son un paso formal en las investigaciones
antimonopolio de la CE que no implica la culpabilidad de las
compañías a las que se dirige.
Tras su recepción, las empresas tienen un plazo para presentar
por escrito unas alegaciones de defensa.
Las compañías también pueden solicitar una audiencia oral, que
suele tener lugar un mes después de la presentación de la
documentación escrita.
La decisión del Ejecutivo comunitario no puede producirse hasta
atender las alegaciones de las empresas, y si se imponen multas
éstas pueden alcanzar hasta el 10 por ciento de la cifra de negocios
anual de cada compañía. EFE