Nueva York, 27 jul (EFE).- La aerolínea estadounidense
Continental inició las pruebas para establecer el sistema conocido
como embarque directo, que permitirá a los pasajeros acceder al
avión sin necesidad de que un agente revise su tarjeta de embarque,
informó hoy el diario USA Today en su edición digital.
Estas pruebas, que suponen la primera experiencia de este tipo en
Estados Unidos, se están realizando en el aeropuerto de Houston
(Texas, EE.UU.), uno de los que registra mayor volumen de pasajeros
del mundo, y se suman a otros sistemas de modernización del
transporte aéreo como el auto check-in.
Según el diario, el embarque directo, comparado con los sistemas
habituales que se utilizan para acceder a los sistemas de metro de
muchas ciudades, es un proceso sencillo que consiste en deslizar la
tarjeta por un lector situado en la puerta de embarque y, una vez
dada la aprobación, el pasajero puede pasar directamente al avión.
Para poder aplicar este sistema, las aerolíneas tendrán que
modificar sus tarjetas de embarque tradicionales añadiendo códigos
de barras de dos dimensiones que permiten acumular más información
del pasajero que las franjas magnéticas o los códigos de barras
habituales, explicó el rotativo.
A pesar de que los agentes de aviación no harán los embarques, sí
que estarán presentes para solucionar los posibles problemas que los
pasajeros encontrarían al usar este nuevo método.
Greg Soule, uno de los portavoces de la Administración de
Seguridad del Transporte (TSA) de Estados Unidos, explicó al USA
Today que esta nueva modalidad de embarque no supondría ninguna
amenaza para la seguridad de los aeropuertos puesto que los
pasajeros serán revisados por agentes antes de llegar a las puertas
de acceso a los aviones.
Este sistema ya es una práctica habitual en otras aerolíneas del
mundo, como Japan Airlines, Air France o Lufthansa, que empezó a
usarlo en 2003 y actualmente dispone de puertas de embarque
automático en los aeropuertos de Múnich y Frankfurt.
Las acciones de Continental, que está en vías de fusionarse con
United Airlines para crear la mayor aerolínea del mundo, bajaron
este martes un 1,72 por ciento en la Bolsa de Nueva York, donde
cerraron a un precio de 25,21 dólares cada una y donde, en lo que va
de año, se han revalorizado un 40,68 por ciento. EFE