Río de Janeiro, 10 feb (EFE).- La clase media brasileña, que
venía creciendo gradualmente desde 2003 y ya representa más del 50%
de la población, sufrió una ligera reducción en 2009 como
consecuencia de la crisis mundial, según un estudio divulgado hoy
por la Fundación Getulio Vargas (FGV).
La clase media o "clase C" representaba el 53,58% de la población
brasileña en diciembre pasado, un poco por debajo del 53,81% de
diciembre de 2008, cuando alcanzó su máximo nivel histórico, según
el estudio del principal centro privado de estudios económicos del
país.
Esa pequeña reducción se produjo en los primeros meses del año y
en marzo llegó a representar el 52,52% de la población, pero luego
volvió a crecer, aclaró el economista Marcelo Neri, coordinador del
Centro de Políticas Sociales de la Fundación.
"La crisis impidió que la clase media siguiera creciendo. El 2009
no fue el año de la clase media, que se estabilizó pero está
volviendo a crecer", afirmó Neri.
La clase media, con una renta mensual de 1.115 a 4.807 reales
(entre 600 y 2.600 dólares) según los criterios de la FGV, venía
creciendo gradualmente desde diciembre de 2003, cuando representaba
el 42,99% de la población.
Pese a la crisis, las llamadas clases A y B, las más favorecidas
y con renta superior a los 4.807 reales, registraron un crecimiento
del 2% con respecto a diciembre de 2008 y pasaron a representar el
15,63% de la población a finales del año pasado.
Las clases A y B también han crecido gradualmente desde diciembre
de 2003, cuando representaban al 10,66% de la población.
La clases D y E, las menos favorecidas y con renta inferior a los
1.115 reales, representaban en diciembre el 30,79% de la población,
según el estudio, que recoge los datos sobre el ingreso de las
familias en las seis mayores regiones metropolitanas del país.
Las clases más pobres representaban en diciembre de 2003 el
46,36% de la población.
Según otro estudio del estatal Instituto de Pesquisa Económica
Aplicada (IPEA) divulgado el mes pasado, al actual ritmo de
disminución de las desigualdades, Brasil puede erradicar la miseria
en 2016 y alcanzar ese año índices de pobreza propios de los países
desarrollados.
De acuerdo con el IPEA, la reducción de la pobreza en Brasil
desde 2003 ha sido posible gracias a los programas de transferencia
de renta del Gobierno, a la estabilidad económica, al crecimiento
del país y al refuerzo de políticas públicas como la elevación del
salario mínimo y la ampliación del acceso al crédito.
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, que asumió el
cargo en 2003, puso en marcha ese mismo año diferentes iniciativas
de combate a la pobreza basadas en la distribución de subsidios para
las familias más pobres.
La principal, el programa "Bolsa Familia", permitió la entrega el
año pasado de subsidios por un récord de 12.454 millones de reales
(unos 6.732 millones de dólares) a cerca de 12,3 millones de
familias, que recibieron cantidades mensuales que van de 22 a 200
reales (de 11,9 y 108,1 dólares). EFE