Lima, 27 jul (EFE).-El vencimiento del último plazo dado por el
Gobierno peruano a la minera Doe Run Perú para reiniciar sus
actividades en el complejo de La Oroya, hecho que puede desencadenar
su cierre, se sumó hoy al largo proceso de desencuentros entre el
Estado y esa empresa de capitales estadounidenses.
Aunque el Ejecutivo peruano no ha explicado cuál será el proceso
que sigue, lo más probable es que se convoque a los acreedores de la
minera para decidir si se hacen cargo del complejo de La Oroya o se
opta por su liquidación.
Desde que en marzo de 2009 se conoció que varios bancos
internacionales suspendieron un importante crédito a la minera, la
incertidumbre sobre el futuro de la empresa ha pesado sobre los
trabajadores de La Oroya, que han protagonizado varios paros y
bloqueos de carreteras.
Mientras Doe Run pedía al Gobierno la ampliación del plazo para
reanudar sus actividades y finalizar un Programa de Adecuación y
Manejo Ambiental (PAMA), que ya había sido prorrogado en 2006 y
2009, las críticas cayeron sobre la empresa por su presunta falta de
real interés en reanudar las operaciones.
Doe Run Perú opera desde 1997 el complejo de la ciudad de La
Oroya, ubicada a unos 176 kilómetros al noreste de Lima, y la mina
Cobriza, en Huancavelica, desde 1998.
Estos son los principales hechos del largo desencuentro entre el
Gobierno peruano y Doe Run:
1998
- 10 de julio: Doe Run Company adquiere del Estado Peruano una
mina subterránea de cobre llamada "Cobriza". También se compromete a
ejecutar un Programa de Adecuación y Manejo Ambiental (PAMA), un
plan medioambiental que fue prorrogado en 2006 y 2009.
2007
-Doe Run Perú se convierte en una filial independiente de Doe Run
Company.
2009
- 25 de marzo: Los bancos BNP Paribás, el Banco de Crédito y el
Standart Bank le suspenden a Doe Run Resources un crédito bancario
de 75 millones de dólares. Su filial peruana empieza a suspender
parcialmente sus operaciones y comienzan las protestas callejeras y
huelgas de sus trabajadores.
- Ese mes, los acreedores de Doe Run y varias empresas minera
ofrecen avalar un crédito de 175 millones de dólares para que Doe
Run reanude sus actividades a cambio de que ponga todas sus acciones
como garantía de su cumplimiento del PAMA.
- 19 de mayo: La Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía
(SNMPE) emite un comunicado en el que expresa su malestar por el
incumplimiento por parte de la empresa minera de los acuerdos
alcanzados para mantener en funcionamiento el complejo de La Oroya.
-20 de mayo: El Gobierno peruano anuncia que trabaja en un plan,
junto a otras empresas mineras, para salvar de la crisis a Doe Run;
sin embargo, descarta que el Estado de apoyo financiero a la
empresa.
- 21 de junio: Los trabajadores del complejo de La Oroya bloquean
la carretera central, que une Lima con las regiones del centro del
país. Tras tres días de paro, los huelguistas deciden suspender la
medida de fuerza y anuncian que pedirán al Poder Judicial que se
designe a los trabajadores como administradores judiciales de la
empresa y así salvar al complejo del cierre.
- 16 de julio: El ministerio de Energía y Minas advierte que
procederá al cierre del complejo de La Oroya si Doe Run no presenta
una propuesta viable para salir de la crisis financiera que
atraviesa.
- 4 de agosto: Doe Run se declara en insolvencia y entra en
reestructuración. También inaugura su nueva planta de ácido
sulfúrico en La Oroya.
-Los trabajadores acuerdan suspender sus labores por un periodo
de 90 días y recibir sólo el 63% de su sueldo con el objetivo de
presionar al Gobierno para que amplíe por 30 meses el plazo dado a
la empresa para ejecutar el PAMA.
-24 de septiembre: El Congreso peruano prorroga por 30 meses el
plazo para que Doe Run culmine su PAMA, que vencía en octubre de ese
año.
2010
- 14 de enero: El ministerio peruano de Energía y Minas retiene
14 millones de dólares que Doe Run había comprometido a través de
una carta-fianza bancaria, hasta garantizar que la empresa cumpla
con su plan ambiental.
- 29 de enero: La SNMPE acuerda expulsar del gremio a Doe Run por
no encontrar en ésta voluntad para solucionar sus problemas y
cumplir sus compromisos.
- 27 de abril: Doe Run presenta los activos de su complejo
metalúrgico como garantía para cumplir con el plan ambiental y
reiniciar las actividades de su fundición antes de fines de julio,
fecha en la que vence el plazo para reiniciar las actividades.
- 19 de mayo: Doe Run presenta un nuevo plan de cuatro puntos en
el que solicita al Gobierno que modifique el contrato de
privatización de la fundición de La Oroya del año 1997, para
"blindarse" ante cualquier denuncia sobre responsabilidad ambiental.
- 20 de mayo: El Gobierno peruano acusa a la empresa Doe Run de
poner en riesgo, con una nueva propuesta, el reinicio de las
operaciones en el complejo metalúrgico de La Oroya.
- 14 de junio: La ciudad de La Oroya inicia un paro indefinido en
apoyo a los trabajadores del complejo que Doe Run tiene en dicha
localidad.
- 18 de junio: Se levanta el paro de La Oroya.
- 22 de junio: La minera Doe Run se compromete a reanudar sus
actividades en el complejo de La Oroya antes de la fecha límite del
27 de julio. Para ello, Doe Run solicita una reunión formal con el
ministerio de Energía y Minas para tratar lo que la empresa
considera como puntos críticos cuya solución permitirían que el
complejo metalúrgico de La Oroya reanudara sus operaciones.
- 23 de julio: El ministerio peruano de Trabajo informa que ya
tiene elaborado un plan para reubicar a los 2.500 trabajadores de
Doe Run Perú que perderían sus empleos si la minera no reinicia sus
operaciones en La Oroya el 27 de julio.
- 27 de julio: El ministerio de Energía y Minas informa el
vencimiento del plazo para que Doe Run reanude sus operaciones en el
complejo de La Oroya y presente los documentos que acreditan el
financiamiento del plan ambiental en dicha localidad.
-Ante la no reanudación de las operaciones por parte de Doe Run,
se abre la posibilidad del cierre del complejo metalúrgico. EFE