Washington, 7 abr (EFE).- Un alto directivo de Toyota advirtió en
enero de las consecuencias de ocultar defectos en sus vehículo,
según documentos obtenidos por medios de comunicación en Estados
Unidos y dados a conocer hoy.
El periódico The Detroit News reveló que Irv Miller, entonces
vicepresidente para relaciones públicas de Toyota Motor Sales en
EE.UU., advirtió el pasado 16 de enero a sus superiores en Tokio de
los problemas de mantener en secreto el defecto.
En su correo electrónico, Miller indicaba: "No estamos
protegiendo a nuestros clientes al mantener esto en silencio. Se ha
acabado el tiempo para ocultar esto".
"Esperamos que puedan hacer que la NHTSA (Administración Nacional
de Seguridad en la Carretera) trabaje con nosotros en un arreglo que
no nos obligue a cerrar", señaló el directivo en otro correo
electrónico, de acuerdo con el periódico.
Los mensajes de Miller se produjeron pocos días antes de que
altos funcionarios de Toyota en EE.UU. viajaran a Tokio para
explicar la situación a la dirección de la empresa.
El 21 de enero Toyota llamó a revisión 2,3 millones de vehículos
por el problema en el pedal del acelerador. Y pocos días después
decidió suspender temporalmente la producción y venta de los modelos
afectados.
También hoy Toyota dijo que "está considerando su respuesta" a la
multa de más de 16 millones de dólares impuesta por las autoridades
estadounidenses, al considerar que la firma japonesa ocultó
información durante meses sobre defectos en sus vehículos.
La empresa dijo a través de un comunicado que el 5 de abril
recibió la notificación de la NHTSA sobre la multa por ocultar que
el pedal del acelerador en algunos de sus vehículos se quedaba
atascado.
La multa impuesta por las autoridades estadounidenses es la más
elevada permitida por la ley y la mayor recibida nunca por un
fabricante de automóviles en Estados Unidos.
El secretario de Transporte de EE.UU., Ray LaHood, justificó la
decisión al afirmar que tienen "las pruebas de que Toyota no cumplió
con sus obligaciones. Lo que es peor, a sabiendas durante meses
ocultaron a las autoridades de EE.UU. un peligroso defecto y no
actuaron para proteger millones de conductores y sus familias". EFE