París, 7 abr (EFE).- La economía estadounidense se recupera a
mejor ritmo que la europea, según la Organización para la
Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), que confirmó hoy que
el crecimiento mundial continuará, aunque ralentizado, en la primera
mitad de 2010.
En un adelanto de sus perspectivas económicas semestrales, la
organización con sede en París confirmó que "la actividad económica
marcó una aceleración en el último trimestre de 2009 en la mayor
parte de las grandes economías, con la notable excepción de la
eurozona".
Pero advierte que la recuperación, que continuará este 2010,
tendrá un ritmo menos vigoroso que el registrado a finales del
pasado año.
En los países del euro el crecimiento pronosticado ahora para el
primer trimestre de 2010 es del 0,9%, frente al 2,4% previsto en
Estados Unidos; en el segundo trimestre la OCDE espera que la
eurozona crezca un 1,9% y que EEUU lo haga en un 2,3%.
El informe adelantado hoy confirma la recuperación económica
mundial, "pero a un ritmo variable según los países y regiones" y
estima que, con los datos de los que dispone la OCDE, el crecimiento
"sin duda va a acusar una ralentización" en el primer semestre de
este año.
El pronóstico global menos favorable del que indicaban los datos
de finales de 2009 está incluido en un adelanto del informe
semestral de la organización y se conoce al día siguiente de que su
secretario general, Ángel Gurría, constatara que la recuperación de
Europa va a la zaga de las potencias económicas.
Gurría había declarado en Praga que veía un "escenario positivo"
en la recuperación económica mundial, aunque precisó que se detectan
"tres velocidades" en ella, en alusión a potencias emergentes como
China y la India, seguidas por EEUU y Japón y, en tercer lugar,
Europa.
La treintena de países que pertenecen a la OCDE se han
beneficiado de la expansión de la actividad en las grandes economías
emergentes, entre las que el informe de la organización destaca a
China, la India y Brasil.
Pero advierte que los desequilibrios mundiales se han acentuado
con el comienzo de la recuperación económica y que, especialmente,
"persisten importantes desequilibrios externos dentro de la zona
euro".
La OCDE destaca la "excepción notable" de la eurozona cuando
trata de la actividad económica mundial de finales de 2009, período
en el que se registró, por el contrario, un afianzamiento del
consumo privado en EEUU y una demanda externa "sólida" en Japón.
De las grandes economías europeas la OCDE precisa en este
adelanto de sus perspectivas semestrales que el mayor crecimiento se
espera que se produzca precisamente en un país que no pertenece a la
eurozona, el Reino Unido, donde en el segundo trimestre de 2010 se
prevé que el PIB aumente un 3,1%.
Para Alemania, la OCDE prevé que su PIB crezca durante el segundo
trimestre de este año un 2,8%, por delante del 1,7% de Francia y muy
lejos del 0,5% pronosticado para Italia.
El adelanto de las cifras macroeconómicas de la OCDE no incluye
desglose para España, aunque el economista jefe de la organización,
Pier Carlo Padoan, preguntado por una comparación entre la situación
española y la de Grecia, aseguró que existen diferencias de base
entre los dos países.
En el caso de España mencionó la existencia de un "problema de
sostenibilidad en su crecimiento", mientras que en el Grecia dijo
que se trata de una cuestión de la sostenibilidad de sus finanzas.
Padoan agregó que en el caso de España lo que se ha producido en
los últimos meses es "un cambio muy rápido" de sus datos
macroeconómicos fundamentales, sin dar más precisiones.
La OCDE advierte de la "gran prudencia" con la que es necesario
abordar las perspectivas de la recuperación económica mundial, dado
el escenario que componen la debilidad del mercado laboral y la
influencia "potencialmente negativa" de los mercados financieros.
Y sobre todo mostró prudencia en relación con la desaparición de
las medidas de apoyo aprobadas por los diferentes países para
estimular sus economías: "los bancos centrales ya han comenzado a
absorber los volúmenes excepcionales de liquidez inyectados durante
la recesión", constata la OCDE.
"Cualquier otra acción en este ámbito deberá estar guiada por las
condiciones financieras", advierte la organización.
El informe indica que la "normalización de los tipos de interés
directores deberá hacerse a un ritmo que estará condicionado por el
vigor de la recuperación en cada país y por las perspectivas de
inflación más allá del horizonte a corto plazo de las previsiones".
EFE
jam/mdo