Washington, 21 may (EFE).- El director de operaciones de British
Petroleum (BP), Doug Suttles, confió hoy en que el rico ecosistema
en el Golfo de México se recuperará del derrame que causó la
explosión y el posterior hundimiento hace un mes de una plataforma
operada por la petrolera.
En una entrevista con la cadena CBS, el ejecutivo de BP también
se mostró confiado en que la multinacional, el productor más grande
de petróleo y gas en EE.UU., sobrevivirá a la tragedia y las
múltiples consecuencias que tiene para la compañía.
Suttles dijo que entiende la frustración de los ciudadanos con la
respuesta de BP al derrame, incluido el uso de químicos tóxicos para
dispersar el crudo, pero recalcó que la empresa está haciendo todo
lo que puede y tan rápido como las circunstancias lo permiten.
"Sé que la gente quiere más información. Quieren que esto se
acabe, que limpiemos todo muy, muy rápido, y estamos intentando
hacer todas estas cosas", afirmó en el programa "The Early Show".
BP ha sido criticado por usar disolventes altamente tóxicos para
dispersar el crudo, y el jueves la Agencia de Protección Ambiental
(EPA, por su sigla en inglés) exigió a la petrolera que usara
sustancias menos tóxicas.
"Los químicos que usamos para dispersar han sido aprobados por la
EPA. Son los químicos más utilizados en la industria", dijo Suttles.
BP anunció hoy que ha subido a su página web un vídeo que
transmite en directo, a través de una cámara submarina, el petróleo
que se fuga del pozo, una medida que ha tenido que tomar por la
presión gubernamental y ciudadana para conocer la cantidad real de
crudo que se escapa a las aguas del Golfo.
La petrolera ha dicho que se trata de 5.000 barriles diarios,
cifra que utiliza también el Gobierno, mientras que otros cálculos
apuntan a entre 25.000 y 95.000 barriles diarios.
El ejecutivo de BP aseguró que hay muchas investigaciones en
marcha para aclarar qué ocurrió exactamente el pasado día 20 y por
qué no funcionaron los sistemas de prevención para evitar la fuga
del petróleo, pero también insistió en que ahora está "tratando de
averiguar cómo detenemos" el flujo y "cómo minimizamos su impacto".
Suttles indicó que el mejor de los escenarios para frenar la fuga
de crudo es si BP consigue llevar a cabo con éxito "el domingo por
la tarde o lunes por la mañana" la operación "top kill", una técnica
mediante la que primero se introduce líquidos pesados y después lodo
y cemento para frenar el flujo del pozo.
"Sé que todos queremos que esto ocurra y sé que todo el mundo
está trabajando en ello", afirmó.
Sin embargo, el peor de los escenarios ocurriría si BP tuviera
que esperar hasta que el pozo de extracción alternativo estuviera
instalado, lo que se produciría probablemente en agosto, dijo.
"Pero entre ahora y entonces probaremos todas las técnicas a
nuestro alcance para detener este flujo", enfatizó Suttles.
Preguntado si confía en que el ecosistema sobreviva el derrame,
que ya ha penetrado en los pantanos de Luisiana, el director de
operaciones de BP admitió que es "difícil de predecir a ciencia
segura", porque él no es un experto, pero que "ha habido vertidos
más grandes en el Golfo de México y lo ha sobrevivido".
"El tiempo lo dirá, pero estoy optimista, muy optimista de que el
Golfo se recuperará plenamente", concluyó. EFE