Londres, 22 abr (EFE).- El precio del barril de Brent cerró hoy
la jornada en 85,67 dólares, un 0,03 por ciento menos que ayer, en
una jornada marcada por el fortalecimiento del dólar frente al euro
por los graves problemas financieros de Grecia.
El barril de petróleo del mar del Norte, de referencia en Europa,
para entrega en junio, acabó la jornada en el Intercontinental
Exchange Futures (ICE) de Londres a 85,67 dólares, 3 centavos de
dólar menos que en la sesión anterior, cuando cerró en 85,70.
El precio máximo negociado fue de 86,30 dólares, mientras que el
mínimo llegó a los 84,15 dólares.
La revisión al alza del déficit público de Grecia generó una
nueva ola de tensión en los mercados europeos, que afectó de manera
especial al euro, que volvió a niveles de 2009 frente al dólar.
El terremoto fue provocado por la revisión del déficit público
heleno que, según Eurostat, se habría situado en el 13,6% del PIB en
2009, frente al 12,7% que se pensaba inicialmente.
Pese al mensaje de calma lanzado por el primer ministro, Yorgos
Papandréu, que aseguró hoy que ese nuevo cálculo "no altera el
objetivo de reducirlo (el déficit) este año en un 4 por ciento", las
réplicas de este terremoto se sucedieron, porque la agencia de
calificación Moody's rebajó la calificación de la deuda griega.
Fue una jornada volátil y de altibajos, una tendencia que
preocupa en el sector petrolero, en un momento en el que parece
haber un consenso acerca de que el nivel actual de precios es muy
elevado, tal y como se puso de relieve en la undécima Cumbre
Internacional del Petróleo celebrada hoy en París.
Los expertos indicaron en la capital francesa que las fuertes
oscilaciones de la cotización del barril de petróleo no son sólo
perjudiciales para las decisiones de inversión en nuevas capacidades
de extracción, que necesitan un tiempo largo para materializarse,
sino también para la fijación de las políticas energéticas.
El presidente de la petrolera francesa Total, Christophe de
Margerie, recordó que hace un año el precio estaba en 39 dólares y
subrayó que, para responder a la demanda global, el principal reto
es poner a producir los yacimientos conocidos.
Por parte de los países productores de crudo, también manifestó
inquietud por los altibajos del mercado el consejero del ministro
saudí de Petróleo Ibrahim Al Muhana, que habló en particular de la
"incertidumbre" sobre la demanda, que ha variado de forma sustancial
en los últimos años.
Al Muhana indicó que las previsiones de consumo global de
petróleo han sido corregidas a la baja, en particular por el
descenso de las necesidades en Europa, que marcó su pico de demanda
hace cinco años.
El responsable ejecutivo de Total confirmó esos cálculos y señaló
que prevé que la demanda global de petróleo va a experimentar "un
crecimiento en los próximos años, pero más moderado". EFE