El dólar estadounidense ha mantenido hoy su máximo de siete semanas frente a una cesta de las principales divisas, mientras los operadores reevalúan las perspectivas de las tasas de interés de EE.UU. tras los sólidos datos de empleo de la semana pasada, que redujeron las expectativas de recortes significativos por parte de la Reserva Federal.
Como resultado del fuerte informe de empleo y las crecientes tensiones en Oriente Medio, que han afectado negativamente al apetito por el riesgo, el dólar se ha mantenido fuerte.
Las expectativas de relajación monetaria por parte de la Reserva Federal han experimentado un cambio significativo, y los mercados ya no anticipan plenamente un recorte de tasas en noviembre.
Según la herramienta CME FedWatch, ahora hay un 86% de probabilidad de una reducción de 25 puntos básicos, una disminución respecto a los más de 70 puntos básicos previstos hace apenas una semana. Solo se prevén 50 puntos básicos de relajación para diciembre.
El índice dólar, que mide la divisa frente a sus principales rivales, cotizaba a 102,41, cerca del máximo de siete semanas de 102,69 alcanzado el viernes.
Alberto Musalem, presidente del Banco de la Reserva Federal de St. Louis, expresó el lunes su apoyo a nuevas reducciones de las tasas de interés, destacando la salud de la economía y la necesidad de que el banco central sea cauteloso con la relajación monetaria. "Es probable que sean apropiadas nuevas reducciones graduales de la tasa de referencia con el tiempo", afirmó Musalem.
El rendimiento del bono del Tesoro estadounidense a 10 años se ha mantenido por encima del 4% en las horas de negociación asiáticas, tras superar este nivel el lunes por primera vez en dos meses, ya que los operadores redujeron las expectativas de recortes agresivos de las tasas.
La atención de los inversores se centra ahora en el próximo informe de inflación, que se publicará el jueves, y en las actas de la reunión de septiembre de la Reserva Federal, que se darán a conocer el miércoles. Además, se prevé la reapertura de los mercados chinos tras una semana de vacaciones.
En los mercados de divisas, el euro cotizaba a 1,098175 dólares, no lejos de su mínimo de siete semanas, y la libra esterlina se situaba en 1,3095 dólares, cerca de su mínimo de tres semanas. El yen mostró una ligera fortaleza a 147,795 por dólar tras alcanzar un mínimo de siete semanas de 149,10 el lunes, mientras los participantes del mercado consideraban la posible trayectoria de las tasas de interés del Banco de Japón.
Las recientes declaraciones del nuevo primer ministro japonés, Shigeru Ishiba, indicando que la economía no está preparada para nuevas subidas de tasas, han provocado una disminución del valor del yen y han suscitado dudas sobre el enfoque del Banco de Japón respecto a los aumentos de tasas.
Otras divisas experimentaron movimientos menores, con el dólar australiano ligeramente más fuerte a 0,6768 dólares. El dólar neozelandés subió un 0,3% hasta 0,6144 dólares antes de la decisión de política monetaria del Banco de la Reserva de Nueva Zelanda del miércoles, donde los economistas anticipan un recorte de 50 puntos básicos.
Reuters contribuyó a este artículo.
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