Varsovia, 16 feb (EFE).- El actual invierno, uno de los más duros
en los últimos años, con intensas nevadas y temperaturas inferiores
a los 20 grados bajo cero, puede restar entre un 0,2 y un 0,5 por
ciento del Producto Interior Bruto (PIB) de Polonia a causa de la
paralización de obras y del aumento del consumo energético.
Economistas consultados hoy por la radio pública polaca estiman
que el invierno provocará unas pérdidas en torno a los 1.500
millones de zloty (unos 375 millones de euros).
La construcción y el transporte son los sectores más afectados
por el clima extremo registrado en los dos primeros meses de 2010,
ya que la nieve y las heladas han obligado a suspender las obras al
aire libre.
La paralización de obras y el consiguiente retraso en los
proyectos está afectando tanto a la construcción civil como pública,
incluyendo las nuevas infraestructuras y los estadios que acogerán
la Eurocopa de 2012, que se ejecutan contra reloj para cumplir con
los requisitos de la UEFA.
Las condiciones climáticas dificultan también el transporte,
especialmente el ferroviario, que en las últimas semanas sufría
cortes de líneas y suspensión de servicios a causa de la nieve y el
hielo.
La situación ha obligado a la compañía estatal de ferrocarriles,
PKP, a gastar cerca de 1,5 millones de euros en la reparación de
líneas eléctricas y en el uso alternativo de locomotoras diesel en
algunos trayectos.
La circulación por carretera no se escapa a estos problemas, y el
tráfico rodado se ha visto ralentizado, con el consiguiente aumento
en el consumo de combustible.
El invierno ha causado el mismo aumento del consumo de gas y
petróleo en la mayoría de hogares del país, donde las facturas han
rebasado las previsiones y han obligado a gastos extraordinarios.
Mientras, los suministradores de sal (para limpiar calles y
carreteras) y de combustible se frotan las manos, ya que este año
aumentarán sensiblemente sus ganancias. EFE