Berlín, 20 sep (EFE).- Las persistentes dudas sobre la situación
de las cuentas públicas en la Eurozona no impidieron la trayectoria
ascendente del euro, que repuntó ligeramente frente al dólar
estadounidense en una jornada de transición sin grandes alicientes.
La moneda común europea cotizaba a las 15.00 horas GMT a 1,3085
dólares, por encima de los 1,3079 dólares a los que se cambiaba a
primera hora de esta mañana.
Por su parte, el Banco Central Europeo (BCE) fijó el tipo de
cambio oficial para el euro en 1,3074 dólares, con lo que el
"billete verde" estadounidense se adquiría a 0,7649 euros.
La jornada careció de elementos de juicio determinantes que
pudiesen marcar una tendencia clara de las cotizaciones en el
mercado de divisas europeo, y la moneda común osciló sobre el precio
de partida de la mañana para terminar con una variación final
mínima.
Así, el euro se aprovechó de que, al igual que la semana pasada,
los expertos continúan mirando con cierto optimismo a Irlanda y a su
atribulado sistema bancario, especialmente castigado por la crisis
financiera.
Según varios expertos, la prima de riesgo de Irlanda y Portugal
está volviéndose apetecible para ciertos cambistas, lo que ayuda al
euro.
Los economistas afirmaron también que la publicación de nuevos
datos sobre el sector inmobiliario en Estados Unidos, que permanece
estancado pero no empeora, aportaron cierta fortaleza al euro en los
últimos intercambios del día.
La moneda común europea protagonizó la semana pasada un repunte
de unos cuatro céntimos netos frente al dólar estadounidense y logró
apreciarse cerca de un dos por ciento frente al "billete verde",
pese a que acumula casi un diez por ciento de pérdidas en lo que va
de año.
La banda de fluctuación en la que se movió hoy el euro osciló
entre los 1,3029 y los 1,3122 dólares. EFE