El euro se estabiliza por encima de 1,19 dólares y las bolsas cierran en rojo

Arantxa Iñiguez

Fráncfort (Alemania), 7 jun (EFE).- El euro se estabilizó hoy por encima de 1,19 dólares y las bolsas europeas cerraron en rojo, con pérdidas moderadas en torno al 1 por ciento, en una jornada muy volátil.

En las primeras horas de la negociación europea el euro llegó a caer hasta 1,1875 dólares, el nivel más bajo desde mediados de febrero de 2006.

Hacia las 17.00 horas GMT la moneda única se había recuperado y se cambiaba a 1,1950 dólares, pero todavía por debajo del nivel del cierre del pasado viernes (1,2035 dólares).

La preocupación por las finanzas públicas de los países que comparten el euro y por Hungría sigue lastrando a esta divisa.

El euro se cotizó en Tokio en la banda de los 108 yenes, su nivel más bajo en ocho años y medio, y también marcó un mínimo histórico frente al franco suizo en 1,3850 francos suizos.

El ministro de Economía húngaro, György Matolcsy, afirmó que el nuevo Gobierno tiene que cumplir con dos grandes tareas: alcanzar un déficit fiscal del 3,8 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) y relanzar la economía.

El sábado, el Ejecutivo intentó tranquilizar a los mercados financieros internacionales al asegurar que la situación económica del país "está estabilizada", tras las declaraciones oficiales de que el Estado estaba al borde de la bancarrota el viernes.

El director del Fondo Monetario Internacional (FMI), Dominique Strauss-Kahn, consideró hoy en Luxemburgo que los problemas de la zona del euro y su divisa son "serios", pero calificó la reacción de los mercados de "exagerada".

La incertidumbre sobre Hungría y las caídas de las bolsas asiáticas lastraron también a los mercados de valores europeos.

Al cierre, la bolsa de Londres cayó un 1,1 por ciento, Fráncfort cedió un 0,6 por ciento, París perdió otro 1,2 por ciento y Madrid lo hizo un 1,4 por ciento.

Atenas encabeza los retrocesos en las bolsas europeas con una bajada hoy del 5,9 por ciento y del 40,7 por ciento en lo que va de año.

La Bolsa de Budapest bajó un 0,45 por ciento pero llegó a caer en la apertura más del 5 por ciento, en un ambiente de gran volatilidad ante las dudas sobre la situación real de la economía del país.

Achim Matzke, experto en mercados de valores de Commerzbank, dijo a EFE que los aspectos que más influyeron hoy en la negociación fueron la incertidumbre respecto a Hungría y la falta de concreción de la reunión del G-20 en Busan (Corea del Sur).

Añadió que el paquete de ahorro para Alemania que presentó hoy la canciller alemana, Angela Merkel, el mayor en la historia de este país, apenas influyó en la negociación bursátil ya que era conocido y los mercados ya lo habían descontado.

El gobierno alemán pretende ahorrar 80.000 millones de euros hasta 2014 con recortes sociales, que afectan ante todo a los parados de larga duración, y medidas que afectan a los grandes consorcios energéticos y al consumidor.

La bolsa de Wall Street presentó una tendencia alcista al inicio de la negociación pero no logró mantener las ganancias y arrastró a los mercados europeos.

En Tokio, el índice Nikkei retrocedió al cierre un 3,84 por ciento.

En la zona del euro los sectores más castigados en bolsa fueron las compañías de materias primas (-2 por ciento) y las tecnológicas (-1,7 por ciento).

Todos los sectores empresariales de la zona del euro presentaron número rojos al cierre de la negociación.

El nuevo castigo que impusieron hoy los inversores a la deuda española llevó el diferencial con la deuda alemana, la más segura de Europa, a más del 2 por ciento o 200 puntos básicos, por primera vez desde la creación de la moneda única europea.

La rentabilidad de los bonos españoles a 10 años se disparó hasta el 4,572 por ciento, mientras que el rendimiento de sus homólogos germanos se colocaba en el 2,571 por ciento.

En lo que va de año la Bolsa de Madrid pierde un 26,3 por ciento, seguida de Milán con una bajada del 19,6 por ciento, de París con un 13,3 por ciento y más lejos de Londres con un retroceso del 6,4 por ciento y de Fráncfort de tan sólo un 0,9 por ciento. EFE