Londres, 10 abr (EFE).- El fundador de EasyJet, Stelios
Haji-Ioannou, llevará próximamente a juicio a su propia compañía de
vuelos baratos, con la que está enfrentado por una cuestión de
"royalties".
Así lo informa hoy el diario Financial Times, según el cual, le
querella podría en el peor de los casos obligar a Easyjet a cambiar
de nombre y a renunciar a su distintivo color naranja, aunque esto
no sea muy probable porque, al ser Haji-Ioannou su mayor accionista,
equivaldría a tirar piedras sobre su propio tejado.
Haji-Ioannou, que fundó EasyJet con sólo 28 años en 1995 quiere
que un tribunal se pronuncie sobre un acuerdo relacionado con la
marca al que se llegó en 2000, cuando se sacó la compañía a bolsa, y
que limita a un 25 por ciento de la facturación total los ingresos
de las "actividades subordinadas" de la aerolínea.
El acuerdo, que garantiza al fundador royalties de un millón de
libras al año (1.11 millones de euros), tenía en parte como objetivo
evitar que EasyJet se convirtiese en un conglomerado que pudiera
suponer un grave hándicap para los otros negocios del grupo Easy que
se proponía acometer, como EasyCar o EasyHotel.
EasyGroup es propietario de la marca "Easy" y la concede bajo
licencia tanto a EasyJet como a los otros negocios con ese nombre.
Cuando se llegó a aquel acuerdo, EasyJet obtenía la mayor parte
de sus ingresos de las ventas de billetes, pero, como ocurre con
otras compañías de vuelos baratos, han aumentado rápidamente los
ingresos por otros conceptos como facturación de equipajes o el
privilegio de subir primeros al avión (speedy boarding) por el que
los pasajeros pagan una cantidad suplementaria.
EasyJet argumenta, frente a su fundador y aún principal
accionista, que esas actividades no son "subordinadas" sino
"básicas" ya que están relacionadas con el negocio de venta de
billetes aéreos.
Haji-Ioannou ha pedido al tribunal que dictamine quién tiene
razón para que pueda llevarse a cabo una auditoría que determinaría
si se ha superado el límite del 25 por ciento fijado en contrato.
Si el juez dictamina a su favor, EasyJet podría decidir si
renegocia el acuerdo y podría tal vez optar por pagar a Haji-Ioannou
más royalties para poder seguir aumentando los ingresos de esas
actividades subordinadas.
En el peor de los casos, dice el periódico, EasyGroup podría dar
por terminado el acuerdo con Easyjet, que tendría que buscarse un
nuevo nombre y un nuevo color, algo que se considera pese a todo
poco probable. EFE