Investing.com – La libra apenas registró variaciones con respecto al dólar durante la tranquila jornada de este lunes tras la publicación de unos alentadores datos sobre ventas minoristas en Estados Unidos y ante las nuevas preocupaciones suscitadas en torno a las tensiones en Ucrania.
El par GBP/USD alcanzó el nivel de 1,6697 durante la mañana de la jornada de negociación en Estados Unidos, su mínimo desde el 8 de abril; posteriormente, el par se consolidó en 1,6727, dejándose un 0,02%.
Era posible que el cruce encontrara un soporte en 1,6658, su nivel más bajo registrado el 5 de marzo, y una resistencia en 1,6788, el máximo del 11 de abril.
Según datos oficiales, las ventas minoristas de Estados Unidos avanzaron en marzo un 1,1%, sobrepasando las expectativas que apuntaban a un aumento del 0,8%. Las ventas minoristas de febrero se revisaron al alza hasta una subida del 0,7% frente a un aumento anteriormente estimado de 0,3%.
Las ventas minoristas clave, de las que se excluyen las de automóviles, crecieron un 0,7% el mes pasado, por encima de las previsiones, que apuntaban a un alza del 0,5% tras la subida del 0,3% registrada en febrero.
Mientras tanto, la confianza de los mercados se vio sometida a mucha presión ante los nuevos temores en torno a la situación en Ucrania, ya que la amenaza de que Kiev emprenda acciones militares contra los separatistas prorrusos en la zona este del país ha aumentado al expirar el plazo establecido para que abandonen los edificios oficiales que han ocupado.
Estados Unidos ha indicado que está dispuesto a imponer nuevas sanciones a Moscú si continúan las invasiones rusas en la zona este de Ucrania.
La libra repuntó con respecto al euro; el par EUR/GBP se dejó un 0,45% hasta el nivel de 0,8262.
La moneda única se debilitó considerablemente después de que el presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, afirmara este sábado que, si el tipo de cambio del euro siguen aumentando, habrá que implementar nuevas medidas de relajación monetaria para evitar que la inflación caiga.
Christian Noyer, gobernador del Banco de Francia y miembro de la junta directiva del BCE, declaró este lunes que es preferible que el euro se debilite, añadiendo que cuanto más fortalecida se ve la divisa, más “acomodaticia” tiene que ser la política adoptada.
Según datos publicados el pasado mes, la tasa de inflación anual de la zona del euro se ralentizó hasta el 0,5%, muy por debajo del objetivo que el BCE se había fijado en el 2%. El banco central decidió mantener inalterada su política monetaria al comienzo de este mes, aunque añadió que consideraría la implementación de medidas poco convencionales para evitar que la inflación de la zona del euro se afiance en niveles bajos.