Zaragoza, 25 ago (EFE).- Los gobiernos central y autonómico de
Aragón, así como el comité de empresa de la planta de General Motors
(GM) en Figueruelas (Zaragoza), consideran la posibilidad de que la
multinacional estadounidense descarte finalmente la venta de Opel o
incluso opte por la suspensión de pagos de su filial europea.
La secretaria general del Ministerio de Industria, Teresa
Santero, ha mantenido hoy una reunión en Zaragoza con los consejeros
aragoneses de Economía, Alberto Larraz, e Industria, Arturo Aliaga,
y representantes del comité de empresa de Figueruelas para analizar
las últimas informaciones disponibles sobre el proceso de venta de
Opel por parte de GM.
Al término del encuentro admitieron que la situación es
"tremendamente compleja" y que GM analiza "todas las posibilidades",
entre las que se incluyen vender Opel a la austríaco-canadiense
Magna o a la belga RHJ International, filial del fondo de inversión
estadounidense Ripplewood; descartar dicha venta, o incluso declarar
su suspensión de pagos.
Santero ha insistido en que la situación está "muy abierta" y
que, mientras existan unas "posiciones tan encontradas" entre GM y
el Gobierno de Alemania -país que concentra 25.000 de los 52.000
empleados de Opel y que apuesta decididamente por la oferta de
Magna-, es "muy difícil anticipar cuál va a ser la solución".
Más que la rapidez, lo importante para el Gobierno español es que
GM tome una "buena decisión" que dé lugar a una empresa "rentable,
con futuro y posibilidades de crecimiento", especialmente para la
planta de Figueruelas, de la que dependen 7.500 empleos directos y
varios miles indirectos.
Santero ha asegurado que el Gobierno está "muy en contacto con
GM" y hace un "seguimiento diario" del proceso mediante varias
reuniones y llamadas semanales con las distintas partes implicadas,
aunque no se dé publicidad de las mismas a los medios de
comunicación, ya que por ahora no hay novedades de las que informar.
La secretaria general de Industria ha dicho que GM, después de
que el pasado viernes no pudiera tomar una decisión por la "fuerte
oposición del Gobierno alemán", estudia "todas y cada una de las
posibilidades", incluida la cancelación del proceso de venta, y
otras "muchas más".
Santero ha subrayado que "no se puede contemplar la ausencia del
Gobierno alemán del plan de GM", ya que casi el 50 por ciento del
empleo está en ese país.
No obstante, ha considerado que el Gobierno germano ha adoptado
una posición "extremadamente radical", al advertir de que sólo
apoyará con avales públicos al proyecto de Magna.
Para Santero, hay que analizar "todas y cada una de las opciones
y escoger la mejor para todos", y ha confiado en que el Ejecutivo
alemán reconsidere su postura.
El consejero aragonés de Economía, Alberto Larraz, ha recordado
que "no es bueno" que GM retrase su decisión porque, "a medida que
pasa el tiempo, la compañía puede tener más dificultades", y ha
insistido en que la decisión debe tomarse bajo criterios
"preferentemente industriales", donde la planta española tiene una
"buena posición".
Larraz ha dejado abiertas todas las posibilidades, incluida la de
que el resto de países con presencia de Opel realicen aportaciones
financieras para entrar en el capital de la compañía.
El consejero ha recordado que del Gobierno alemán es el único que
se ha inclinado abiertamente hacia una opción, mientras que el resto
están "abiertos a todas las posibilidades que existen".
Asimismo, ha considerado que la presión ejercida por el
presidente del comité europeo, Klaus Franz, en favor de Magna es
"absolutamente inapropiada" porque hay que ser "prudentes, moderados
y respetar las decisiones de GM, y no presionar continuamente en los
medios de comunicación".
El secretario general de UGT en Figueruelas y único miembro
español en el comité de empresa europeo, Pedro Bona, ha insistido en
que la "complejidad de la situación es tremenda" y ha valorado la
labor de la administración española en la defensa de una solución de
carácter europeo basada en criterios económicos e industriales.
"La incertidumbre para los trabajadores sigue siendo la misma",
ha lamentado Bona, quien ha dicho que la representación sindical
apoyará cualquier opción que permita a la compañía "seguir
adelante".
Bona ha calificado de "auténtica locura" el posicionamiento en
favor de uno de los candidatos, "despreciando" el resto de
alternativas para solucionar el futuro de Opel. EFE