Davos (Suiza), 28 ene (EFE).- El presidente de Corea del Sur, Lee
Myung-Bak, cuyo país asume este año la presidencia rotativa del
G-20, abogó hoy porque este grupo establezca sin demora la agenda
pos-crisis y aplique todas las reformas que sean necesarias.
"El G-20 continuará este año sus esfuerzos para superar las
consecuencias de la crisis financiera global y redoblar sus
esfuerzos para coordinar políticas que lleven hacia la
recuperación", dijo Lee.
"Pero, además, es ya hora de que el G-20 establezca la agenda
pos-crisis como una plataforma que asegure un crecimiento
equilibrado de la economía mundial en los próximos meses y años",
añadió.
El presidente surcoreano realizó una alocución especial en la
cuadragésima edición del Foro Económico de Davos, que tiene lugar
esta semana en la estación alpina homónima.
El mandatario asiático considera que durante este año, el G-20
debe establecer un marco de largo plazo para la coordinación
política "que asegure un crecimiento equilibrado y sostenible".
Para lograrlo, Lee pretende que el G-20 se concentre en conseguir
el consenso para que se pueda implementar el Marco para un
Crecimiento Fuerte, Sostenible y Equilibrado, que se acordó en la
última reunión del grupo en Pittsburg.
Además, según el presidente surcoreano, se deben proseguir las
acciones con el fin de mejorar la regulación financiera, así como
reformar las instituciones internacionales de crédito como el Banco
Mundial o el Fondo Monetario Internacional.
"En relación a la regulación financiera, hay asuntos importantes
que deben resolverse como la manera de parar la naturaleza
pro-cíclica del sistema financiero, así como el problema de las
instituciones que son 'demasiado grandes para caer' que últimamente
han recibido nuevos ímpetus".
Con respecto a las instituciones internacionales de crédito, Lee
abogó porque su reforma obtenga el mayor respaldo posible y tenga
credibilidad, y para ello señaló que es necesario que su estructura
de gobierno sea "realmente representativa".
El presidente surcoreano señaló que otro de los puntos de la
agenda del G-20 debe ser el establecimiento de lo que se conoce como
la "Red de Salvaguarda Financiera Global", que cree un mecanismo
para evitar los repentinos cambios de los flujos de capital en los
países emergentes y en desarrollo.
Lee quiere que todas estas reformas tomen cuerpo en la reunión
que celebrará el G-20 en noviembre en Seúl, y recordó que Corea del
Sur es el primer país miembro que preside ese grupo y no forma parte
del G-8, que aglutina a los países más ricos del mundo.
Finalmente, Lee recordó a los dirigentes de bancos presentes en
el Foro que fue el G-20, es decir los gobiernos, el que actuó y
logró parar la crisis financiera creada por dichos banqueros.
No obstante, quiso aglutinarlos en los esfuerzos de recuperación
y les invitó a participar en una Cumbre de Negocios que se
desarrollará en Seúl de forma paralela al encuentro de los
presidentes del G-20. EFE