Madrid, 11 ene (EFE).- El Banco Santander inició hoy el proceso
de sustitución de las marcas Abbey, Brandford & Bingley y Alliance &
Leicester para unificar su marca en el Reino Unido, un país en el
que ya cuenta con 25 millones de clientes y 1.300 oficinas, y en el
que pretende alzarse como el "número uno".
El presidente del Santander, Emilio Botín, acompañado del piloto
británico de Fórmula Uno Lewis Hamilton, uno de los reclamos
publicitarios del banco, presidió hoy en Londres el cambio de nombre
de la primera sucursal de Abbey que se convirtió en oficina del
Santander.
En un sólo día, 350 oficinas del Abbey y del Bradford & Bingley
en este país vieron cambiados sus nombres tradicionales por la marca
de su propietario, el Santander.
El Santander adquirió la entidad británica Abbey en noviembre de
2004 y el pasado año compró Alliance & Leicester y la red y los
depósitos de Bradford & Bingley.
A finales de enero serán 1.000 las oficinas en el Reino Unido que
llevarán la marca Santander, sello que habrán adoptado las 1.300
oficinas de este grupo antes de que termine 2010. Las últimas en
hacerlo serán las de Alliance & Leicester.
Botín destacó que la marca Santander es "potente, atractiva y la
número cuatro desde el punto de vista financiero en el mundo", y por
ello se mostró convencido de que el cambio de rótulo será
"buenísimo" tanto para los clientes como para los directivos y la
entidad.
El presidente del Santander aprovechó el evento para ratificar
-tanto en español como en inglés- la intención de convertir a la
entidad, ahora la segunda del mercado británico de hipotecas con una
cuota del 13 por ciento, en el primer banco del Reino Unido.
Botín destacó que la "gran ventaja" de la entidad española es la
diversificación geográfica entre países emergentes y maduros, y
apuntó que el Santander es el "primer banco del mundo que está
instalado en diez mercados importantes".
Botín también avanzó que el grupo financiero español tuvo el
pasado año unos "resultados magníficos", que se darán a conocer el
próximo 5 de febrero.
La cotización bursátil del Santander subió hoy el 0,17 por
ciento, lo que situó la capitalización del banco al borde de los
100.000 millones de euros, cerca de colocarse entre los seis
principales bancos del mundo por valor en bolsa.
Las acciones de la entidad, que el pasado año subieron el 85,4
por ciento, cerraron en 11,98 euros, aunque alcanzaron un máximo en
la sesión de 12,135 euros, una cotización equivalente a una
capitalización de 99.856 millones de euros.
Santander ofreció hoy a sus clientes la recompra de bonos
subordinados, emitidos por distintas entidades del grupo y que
cotizan en las bolsas de Londres, Luxemburgo y Nueva York, por un
importe de aproximadamente 3.260 millones de euros.
El Santander explicó que el propósito de la operación es "mejorar
la estructura de recursos propios y fortalecer el balance del Grupo"
y precisó que los fondos necesarios para esta operación los extraerá
de "su liquidez ordinaria disponible".
La entidad pagará por estos bonos, pertenecientes a trece series
diferentes, un importe equivalente a la suma del precio de compra
más los intereses devengados y no pagados desde la última fecha de
pago de intereses (incluida) hasta la fecha de liquidación de las
ofertas de venta (excluida).
Hoy también se conoció, por declaraciones del ministro de
Fomento, José Blanco, a RNE, que el Santander, junto con otras
entidades financieras, está interesado en participar en el plan
extraordinario de infraestructuras de 15.000 millones de euros que
este Ministerio realizará en los próximos dos años en colaboración
con el sector privado. EFE