Washington, 3 sep (EFE).- El sector privado en Estados Unidos
tuvo en agosto una ganancia neta de 67.000 puestos de trabajo, el
octavo crecimiento mensual consecutivo, pero el índice general de
desempleo subió una décima al 9,6 por ciento, informó hoy el
Gobierno.
El presidente Barack Obama calificó como "noticia positiva" el
crecimiento del empleo privado y recordó que cuando él llegó a la
Casa Blanca en enero de 2009 el país registraba una pérdida neta de
700.000 empleos por mes.
Obama instó al Congreso a que apruebe un proyecto de ley que
proporciona ayuda a las empresas pequeñas, y anunció que la semana
próxima él y su gabinete económico centrarán su atención en otras
medidas que den más vigor a la reactivación económica.
Christina Romer, quien hoy concluye su trabajo como asesora
económica de la Presidencia y ahora vuelve a la Universidad, sostuvo
que Estados Unidos "tiene los medios para reducir el desempleo y las
preocupaciones acerca del déficit no pueden servir de excusa para
dejar que sufran los desempleados".
Romer, quien a comienzos de 2009 propugnó un estímulo
gubernamental mucho mayor que los 787.000 millones de dólares que
Obama logró del Congreso, dijo que "todo lo que falta es la voluntad
y la sabiduría" para usar esos medios.
Los mercados reaccionaron favorablemente al informe del
Departamento de Trabajo, ya que el índice general de desempleo se
ubicó en agosto en lo que esperaba la mayoría de los analistas, pero
la pérdida neta de puestos de trabajo -54.000- fue menor que lo
esperado por los expertos, que habían calculado una erosión de entre
80.000 y 105.000 empleos.
Otro detalle del informe que mejoró el tono de los mercados fue
el aumento neto de 67.000 puestos de trabajo en el sector privado,
que se suma a los 107.000 añadidos en julio. La mayoría de los
analistas había calculado un incremento de 40.000 empleos en la
empresa privada.
El empleo gubernamental tuvo una pérdida neta de 121.000 puestos
de trabajo, de los cuales 111.000 fueron empleos con el Gobierno
federal.
Un factor que ha afectado las estadísticas de empleo y desempleo
este año ha sido la contratación temporal de cientos de miles de
personas para la realización del censo nacional, una labor que la
Constitución ordena cada diez años.
La mayor parte de esos trabajadores completó sus asignaciones
entre mayo y junio, pero la reducción de la fuerza laboral del censo
sigue afectando las cifras durante meses ya que los despidos son
graduales.
Es por esa razón que muchos economistas consideran las cifras del
sector privado, que excluyen el empleo gubernamental, como una
medida mejor del desempeño de la economía.
El de agosto ha sido el índice de desempleo más alto desde mayo
pasado y muestra que persiste la debilidad del mercado laboral más
de un año después de que la economía de Estados Unidos retornara al
crecimiento.
El informe muestra que las remuneraciones horarias promedio de
los trabajadores subieron 3 centavos, o un 0,2 por ciento en agosto,
para ubicarse en 19,98 dólares. Los analistas esperaban un
incremento del 0,1 por ciento.
Las remuneraciones promedio han subido un 1,7 por ciento en los
últimos doce meses.
El informe de hoy sustenta la opinión del presidente de la
Reserva Federal, Ben Bernanke, quien cree que están dadas las
condiciones para una recuperación más robusta de la economía de
Estados Unidos en el próximo año.
En agosto del sector manufacturero perdió 27.000 empleos, después
de ganar 34.000 el mes anterior.
El empleo en el sector de servicios disminuyó en 54.000 puestos
de trabajo; las empresas de construcción añadieron 19.000
trabajadores, el primer incremento en cuatro meses, y el sector
minorista tuvo una pérdida neta de 4.900 empleos. EFE
jab/pgp/acb