Rafa Caballero
Ginebra, 21 sep (EFE).- El avión "Solar Impulse", propulsado sólo
por energía solar, ha dado un paso más hacia su objetivo de dar la
vuelta al globo en 2013, al llegar hoy a Ginebra desde el aeródromo
suizo de Payerne, en su primer aterrizaje en un aeropuerto
internacional.
Hasta el momento, el aparato había operado únicamente en
aeródromos sin tráfico comercial, principalmente en el de Payerne,
próximo a Ginebra, donde han acontecido la mayoría de sus hazañas, y
de donde despegó esta mañana.
Un total de 4 horas y 20 minutos tardó el avión en cubrir el
trayecto de alrededor de 100 kilómetros que separan ambos
aeropuertos, hasta que a las 12.24 hora local (10.24 GMT),
aterrizaba en la pista del aeropuerto de Ginebra en medio de una
enorme expectación, como pudo comprobar Efe.
Fascinación causó por la particular forma de la nave, con 63,4
metros entre los extremos de sus alas, la misma envergadura que la
de un Airbus transatlántico, pero con un peso cercano a 1.600 kilos,
algo superior a un automóvil medio.
Para despegar de Payerne, le había bastado una velocidad al
alcance de una bicicleta, entre 35 y 40 kilómetros por hora, con la
que el "Solar Impulse" dejaba tierra firme para disponerse a abordar
otra etapa más en su viaje hasta su meta de voltear el planeta.
Su primer gran logro se remonta al pasado 7 de abril, cuando
completó su primer vuelo de larga duración, concretamente de una
hora y media, y sólo tres meses más tarde consiguió volar durante
más de 26 horas seguidas, incluidas las de la noche, como es obvio.
Ese día, gracias exclusivamente a la energía obtenida del sol que
captó de día, el avión solar promovido por el psiquiatra suizo
Bertrand Piccard, cuyo abuelo inventó el batiscafo, estableció otra
marca para aparatos de su naturaleza, además de la de tiempo en el
aire.
Alcanzó 8.564 metros de altitud sobre el nivel del mar, una cifra
determinante para que el prototipo que ha costado unos 70 millones
de euros invada de alegría a Piccard, que en 1999 se convirtió en el
primer hombre en dar la vuelta al mundo en globo sin escalas.
El próximo destino de las 12.000 células solares que conforman el
avión será de nuevo Payerne, en un vuelo que partirá en unas horas.
Mañana, miércoles, el "Solar Impulse" realizará otro vuelo a un
segundo aeropuerto internacional, el de Zúrich, lo que le llevará a
cruzar prácticamente el país helvético de punta a punta en poco más
de un día. EFE
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