En los mercados de divisas hoy, el yen se ha estabilizado tras experimentar un notable repunte el viernes. La moneda japonesa había subido cuando Shigeru Ishiba, ex ministro de defensa, ganó el liderazgo del Partido Liberal Democrático gobernante.
Ishiba, quien está destinado a convertirse en el próximo primer ministro de Japón, ha sugerido que la política monetaria del país debería mantenerse acomodaticia dadas las condiciones económicas actuales. El yen registró una ligera caída del 0,4% hasta los 142,75 por dólar, después de su aumento del 1,8% el viernes.
Los comentarios de Ishiba el domingo sobre la posibilidad de elecciones anticipadas en los próximos meses han llevado a los analistas a considerar que esta incertidumbre política podría afectar temporalmente al yen.
Ray Attrill, jefe de estrategia de divisas en National Australia Bank (OTC:NABZY), señaló que las posibles elecciones podrían dejar al Banco de Japón al margen de las decisiones de política hasta diciembre, lo que podría influir marginalmente en el valor del yen. Mientras tanto, el dólar se debilitó frente a las divisas de materias primas, impulsado por el optimismo de los inversores sobre las perspectivas económicas de China.
El euro se mantuvo estable en 1,1172 dólares, y la libra esterlina cotizaba a 1,3381 dólares. Los mercados ahora esperan con interés los datos de empleo de EE.UU. programados para el viernes, que podrían influir en la trayectoria de los recortes de las tasas de interés estadounidenses. Además, los inversores anticipan con gran expectación los datos de inflación europea previstos para el martes y los datos económicos chinos esperados para más tarde hoy.
Tanto el dólar australiano como el neozelandés están cotizando cerca de sus máximos de 2024, alcanzados el viernes, ya que los recortes de tasas y el apoyo fiscal anticipado en China han aumentado las esperanzas de una mejora en la economía china, que se encuentra en desaceleración. El dólar australiano aumentó un 0,3% hasta los 0,6920 dólares, alcanzando un máximo de 20 meses de 0,6937 dólares el viernes. De manera similar, el dólar neozelandés subió un 0,3% hasta los 0,6360 dólares, marcando su nivel más alto desde diciembre.
La semana pasada, la medida de inflación preferida de la Reserva Federal de EE.UU. indicó una tasa de inflación del 2,2% para los 12 meses hasta agosto, lo que provocó una disminución en los rendimientos y el dólar estadounidenses. Joe Capurso, estratega del Commonwealth Bank of Australia (OTC:CMWAY), señaló que la tendencia para el próximo año o más es que el dólar disminuya, citando la inflación controlada y la disminución de las tasas de interés como señales positivas para las perspectivas económicas globales y las divisas de materias primas como el dólar australiano.
En China, una serie de medidas de estímulo ha provocado un repunte en el yuan, a pesar de los recortes en las tasas de interés. Los inversores han mostrado un mayor interés en las acciones chinas, que experimentaron su mejor semana en una década. El yuan superó la marca significativa de 7 por dólar en el comercio offshore el viernes y se registró por última vez a 6,9761 antes de que abriera el mercado onshore.
Reuters contribuyó a este artículo.
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