Por Francisco Luis Pérez
Taipei, 3 ago (EFE).- En menos de una semana, tres señeras
empresas taiwanesas han desvelado sus planes de penetración en el
mercado chino de las telecomunicaciones, automoción y manufactura
para la exportación.
HTC, competidora de Apple, Samsung y Nokia en el sector de los
superteléfonos, anunció la semana pasada en Pekín su ingreso en
China con su propia marca y cuatro nuevos superteléfonos, de la mano
de la telefónica China Mobile y la distribuidora de productos
electrónicos GOME Electrical Appliances Holding Ltd., las primeras
de su país.
"China es el mayor y más sofisticado mercado de portátiles en el
mundo", señaló el gerente de HTC, Peter Chou, quién manifestó gran
confianza de éxito en el nuevo mercado "por la orientación al
cliente de su empresa".
HTC, que hasta hace pocos años sólo fabricaba móviles para
grandes marcas internacionales, se perfila como un fuerte competidor
mundial en los superteléfonos con Windows de Microsoft y Android de
Google.
La pequeña presencia de la telefonía de Apple en China, con un
7,1 por ciento del mercado, frente al 27 por ciento de Nokia, el 18
por ciento de Samsung, el 14 por ciento de Motorola y el 9 por
ciento de Sony Ericsson parece ir a favor de la expansión de HTC en
este nuevo mercado.
Hasta la fecha, HTC concentra sus ventas en Estados Unidos y
Europa, pero no quiere perderse el ingreso en el emergente mercado
chino de los superteléfonos, estimado en 26 millones de unidades
este año por la empresa de seguimiento de mercados IDC.
La automotriz taiwanesa Yulon también ha sellado, esta semana,
acuerdos con China, para producir su modelo "Luxgen", por medio de
Dongfeng Yulon, una inversión conjunta con la fabricante china
Dongfeng Automobile Co, e invertirá 111,5 millones de dólares en
este proyecto centrado en Hangzhou, provincia de Zhejiang.
El plan es producir inicialmente 120.000 vehículos anuales del
modelo "Luxgen", en el que la empresa isleña ha invertido ya 472
millones de dólares en investigación y desarrollo.
Hon Hai, la empresa madre de Foxconn, inicia el 20 de agosto la
construcción de una nueva planta en la provincia china de Henan,
destinada principalmente a la producción de iPhones de Apple, y su
objetivo es alcanzar más del 50 por ciento de la producción mundial
de productos electrónicos para marcas internacionales.
Foxconn planea invertir 740 millones de dólares en dos fábricas
en Henan, capital de Zhengzhou, mientras mantiene su principal
complejo en Shenzhen, en la frontera con Hong Kong, donde emplea más
de 400.000 obreros.
HTC, que es ya el principal fabricante mundial de productos
electrónicos para marcas internacionales, ya tiene plantas en las
provincias chinas de Hebei, Shanxi y Hubei, y la ciudad de
Chongqing, ubicada en el sudoeste de China.
Acer, el segundo fabricante de ordenadores del mundo, también ha
desvelado hace unos meses que dará prioridad a aumentar su presencia
en China, donde reina su rival Lenovo.
La empresa isleña ha incrementado su plantilla en China y tiene
como objetivo capturar una cuota de mercado del 10 por ciento en el
mercado de los ordenadores, en el que Lenovo, el cuarto fabricante
mundial de ordenadores, controla ahora el 30 por ciento.
La firma a finales de junio del Acuerdo Marco de Cooperación
Económica (AMCE) con China y el fuerte acercamiento económico y
social con el ex rival político está dinamizando la penetración
isleña en China, con consecuencias mundiales difíciles de
desentrañar. EFE