Tokio, 7 feb (EFE).- El Gobierno nipón aprobó hoy un proyecto de ley destinado a fortalecer el sector agrícola, pesquero y forestal nipón a través de un fondo mixto que se espera cuente con cerca de 400.000 millones de yenes (4.000 millones de euros) en cinco años.
El fondo servirá para dotar a estos sectores de las herramientas necesarias para revitalizar su estructura, con medidas destinadas a crear nuevas áreas de negocio como el procesamiento o la distribución y venta de alimentos, informó la agencia local Kyodo.
El objetivo es expandir las industrias y hacer que su mercado, que en 2010 fue de 1 billón de yenes (9.947 millones de euros), se amplíe hasta los 10 billones de yenes en 2020 (99.473 millones de euros), según Kyodo.
"Podemos crear empleos e ingresos en las economías regionales" potenciando la industrialización combinada de las empresas ganaderas, agrícolas, forestales y pesqueras del país, afirmó el ministro nipón de Agricultura, Forestal y Pesca, Michihiko Kano.
El Gobierno japonés prevé destinar en el año fiscal 2012, que empieza el 1 de abril, 30.000 millones de yenes (cerca de 300 millones de euros) en inversiones y préstamos a este fondo, que también podría recibir otros 2.000 millones de yenes (casi 20 millones de euros) de las empresas privadas, indicó Kyodo.
Hasta 2017, el Ministerio de Agricultura prevé invertir 200.000 millones de yenes (casi 2.000 millones de euros), y se espera que con las contribuciones de instituciones financieras regionales y municipios locales la cantidad total ascienda a unos 400.000 millones de yenes (cerca de 4.000 millones de euros).
Los fondos se administrarán a través de una institución específicamente creada por empresas públicas y privadas involucradas en el proyecto, que además crearán un panel de expertos nacionales y extranjeros que determinarán la adjudicación de los fondos.
La pesca y agricultura fueron algunos de los sectores más golpeados por la crisis nuclear desatada por el terremoto y el tsunami que en marzo del año pasado asoló el noreste de Japón y dejó casi 20.000 muertos y una reconstrucción que se calcula en unos 180.000 millones de euros. EFE