Santo Domingo, 10 nov (EFE).- El Fondo Monetario Internacional
(FMI) calificó hoy de "balanceado" y "ambicioso" el programa
crediticio por valor de 1.700 millones de dólares firmado la víspera
con la República Dominicana, cuyas autoridades deberán diseñar e
implementar la reforma estructural que involucra el acuerdo.
Así lo expresaron el asesor principal del FMI, Rodrigo Valdés; y
el jefe de la misión del organismo en la República Dominicana,
Alejandro Santos, en una conferencia telefónica desde Washington.
El organismo internacional aprobó ayer un programa crediticio que
pone a disposición de la República Dominicana 1.700 millones de
dólares durante 28 meses para ayudar al país a responder a la crisis
económica.
Alejandro Santos explicó en la conferencia que alrededor de 450
millones de dólares serán destinados al Ministerio de Hacienda, para
apoyar el presupuesto nacional y 1.250 millones de dólares al Banco
Central (BC) para fortalecer su niveles de reservas.
Unos 300 millones serán desembolsados de manera inmediata, según
precisó ayer el BC.
"Es un programa muy ambicioso y equilibrado tanto en el área
macroeconómica como en la estructural y en la social", aseguró
Santos.
El funcionario del FMI reconoció que la situación económica ha
afectado a los sectores más vulnerables de la población, por lo que
uno de los objetivos del programa es aumentar en el corto plazo el
número de familias sujetas al programa de transferencia
condicionada.
Además, aumentar el gasto social, en especial, en educación y
salud, puntualizó.
Tanto Santos como Valdés aseguraron que la reforma estructural
que involucra el acuerdo serán diseñadas e implementadas "total y
completamente" por las autoridades locales.
El programa crediticio tiene como meta "fortalecer la
sostenibilidad económica del país a medio plazo, reducir las
vulnerabilidades reveladas por la crisis y sentar las bases para una
recuperación y sostenida del crecimiento", según el Fondo.
Como parte del acuerdo, el Gobierno se comprometió a eliminar los
subsidios generalizados en el sector eléctrico y a mejorar la
administración tributaria, explicó el organismo.
Los fondos del organismo permitirán a República Dominicana
estimular la economía en el último trimestre de este año y la
primera mitad de 2010, con más inversiones y gasto social.
Después de esa fecha se ajustará el cinturón para reducir el
déficit y la deuda, según dijo ayer el Fondo.
Como parte del nuevo pacto, el Gobierno se ha comprometido a no
tener déficit en 2010 y a una subida gradual del saldo público hasta
un superávit del 2 por ciento en 2012, de acuerdo con un resumen
divulgado en octubre.
El acuerdo pretende también cimentar la confianza en la política
económica del Gobierno y atraer financiación adicional del Banco
Interamericano de Desarrollo (BID) y el Banco Mundial (BM). EFE