La Habana, 11 oct (EFE).- Cuba trabaja en el dragado y
modernización tecnológica de sus tres puertos principales con la
colaboración de China y Venezuela ante el reto que le supondrá la
ampliación del Canal de Panamá, informaron hoy medios oficiales.
Las obras buscan aumentar el calado para operar buques de mayor
porte en los puertos de La Habana, Cienfuegos y Santiago de Cuba,
por donde transita más del 80 por ciento de las importaciones
anuales de la isla, explicó al semanario Opciones el director de la
Empresa de servicios portuarios de La Habana, Miguel Izquierdo.
El funcionario precisó que la financiación parte de un convenio
aprobado recientemente entre China y Cuba, y de otro con la empresa
mixta Puertos del ALBA (Alianza Bolivariana para los Pueblos de
Nuestra América), creada para impulsar el desarrollo y modernización
de terminales portuarias venezolanas y cubanas.
Autoridades y expertos del sector citados por Opciones señalan
que mientras más calado ganen los puertos de la isla podrán operar
buques de mayor capacidad, y sus importaciones serían menos
costosas.
Añadieron que "durante casi tres décadas no se limpiaron los
sedimentos depositados en los fondos", por lo que disminuyó el
calado para el arribo de los barcos, y al reducir el peso y los
volúmenes de carga aumentaron los costos de fletes a las
importaciones.
Izquierdo recordó que en la década de 1980 los puertos cubanos
recibían unos 12 millones de toneladas en cargas, pero ese volumen
decreció a unos tres millones por diversas razones, entre las que
destacó la crisis económica mundial.
Explicó que en la terminal de La Habana, donde sólo se están
operando unas 600.000 ó 700.000 toneladas de cargas al año de una
capacidad total de 1,2 millones, se mejora la infraestructura de la
plataforma de descarga y otros medios tecnológicos, y se han
modernizado cuatro de sus siete grúas.
Como parte de su estrategia para incrementar el tráfico marítimo,
Cuba también tiene previsto construir el nuevo Puerto del Mariel, al
oeste de La Habana, en cuyas obras participará Brasil con una
financiación de 300 millones de dólares, que cubrirá casi la mitad
del costo total del proyecto. EFE