Por Kevin Plumberg
HONG KONG, feb 26 (Reuters) - Las acciones asiáticas cayeron el jueves luego de que un repunte temprano se esfumó y los inversores encontraron pocos incentivos para hacer apuestas a largo plazo, frente a la reducción de las perspectivas de ganancias económicas y corporativas.
El yen cayó a su mínimo en tres meses contra el dólar debido a que el creciente daño económico y la prolongada incertidumbre política en Japón arruinan la reputación de refugio seguro de la moneda nipona y los inversores locales continúan enviando dinero a mercados de bonos extranjeros en busca de mejores rendimientos.
El alza en los rendimientos de los bonos a largo plazo del Tesoro, un declive en el oro por debajo de 950 dólares la onza, y mercados de crédito más estables han convencido a algunos inversores de buscar valor en activos de alto riesgo como acciones, especialmente con valores tan bajos.
Sin embargo, las exportaciones regionales continúan deprimidas en medio de la desaceleración global y las perspectivas de ganancias están desvaneciéndose rápidamente, lo que ha paralizado a muchos inversores.
"Hay demasiada incertidumbre en el mercado", dijo Martin Angel, corredor de Patersons Securities en Australia. "Esto hace básicamente que mucha se retire a los margenes", agregó.
El índice promedio japonés Nikkei <.N225> cerró casi sin variaciones durante el día, con el yen debilitado no ofreciendo impulso a las acciones de grandes exportadores como Canon Inc <7751.T> o Sony Corp <6758.T>.
Los inversores japoneses han estado vendiendo de manera creciente acciones locales y derrochando en bonos extranjeros.
En las últimas dos semanas, han vendido 661.000 millones de yenes netos en acciones japonesas y comprado 2.594 billones de yenes en bonos extranjeros, de acuerdos a datos del Ministerio de Finanzas de Japón.
El índice MSCI de acciones asiáticas fuera de Japón <.MIAPJ0000PUS> caía un 0,47 por ciento, quedando a corta distancia de su mínimo de tres meses alcanzado el martes.
El índice Hang Seng de Hong Kong <.HSI> tuvo un desempeño inferior al de la región, cayendo un 0,8 por ciento en el intercambio de cara a una expiración de futuros el jueves.
Las acciones estadounidenses tuvieron un duro miércoles y cerraron finalmente la sesión con una caída luego de que el presidente Barack Obama advirtió acerca de una regulación más estricta de Wall Street, palabras que casi siempre son interpretadas por el mercado como menos ganancias corporativas.
Los reguladores bancarios estadounidenses lanzaron un programa de "prueba de tensión" para evaluar la habilidad de los mayores bancos para enfrentar la posibilidad de una recesión más profunda, en la que la tasa de desempleo supere el 10 por ciento el próximo año.
Aunque el escenario es extremo, la acción ofreció un ápice de comodidad a los inversores.
La extendida incertidumbre no ha impedido que los
corredores se desprendan de sus yenes. El dólar subía un 0,4
por ciento, a 97,77 yenes
El oro perdía un 0,6 por ciento, a 945,60 dólares
(Reporte adicional de Simone Giuliani en Melbourne; editado por Hernán García)