Seúl, 5 ago (EFE).- La Policía surcoreana continuó hoy, esta vez
desde el techo, el asedio a la fábrica de Ssangyong en su intento de
desalojar a los trabajadores en huelga que la ocupan desde hace más
de dos meses, informó la agencia local Yonhap.
Un huelguista que intentó evitar que la Policía irrumpiera en la
planta de Pyeoongtaek, a 70 kilómetros al sur de Seúl, cayó hoy
desde el techo de la sección de pintura de la fábrica, donde se
atrincheran los trabajadores en huelga, según varios testigos
citados por la agencia surcoreana de noticias.
Por el momento se desconoce el estado de salud de este trabajador
accidentado.
Cerca de 550 huelguistas se enfrentaron a la Policía con barras
de metal, a pesar de que las autoridades les superaban en número en
el asedio a la fábrica, rodeada del humo de incendios de edificios
cercanos al de pintura, donde se guarda una enorme cantidad de
materiales inflamables.
En la operación participaron alrededor de 4.000 agentes y varios
camiones de bomberos.
Las autoridades surcoreanas iniciaron el pasado lunes este asedio
para acabar con la ocupación de la única fábrica de Ssangyong, donde
unos 550 empleados permanecen desde el pasado 25 de abril en
protesta contra el plan de reestructuración de la compañía.
Al menos 27 policías y trabajadores no sindicados resultaron
heridos durante los enfrentamientos del lunes.
El sindicato advirtió en un comunicado que "luchará hasta la
muerte si la policía trata de acabar con la ocupación", mientras que
los familiares de los empleados pidieron a la Comisión Nacional de
Derechos Humanos que suspenda la redada, para evitar el
derramamiento de sangre, según Yonhap.
El choque entre la Policía y los huelguistas se ha producido
después de que el domingo se paralizaran las negociaciones entre la
compañía y el sindicato, que no se pusieron de acuerdo en el número
de despidos.
Ssangyong propiedad del fabricante chino Shanghai Automotive
Industry, que lleva en suspensión de pagos desde febrero, planea
reducir en un 36 por ciento su plantilla, 2.646 trabajadores, para
poder sobrevivir a los efectos de la crisis económica global y el
descenso de la demanda.
Si Ssangyong no logra llevar a cabo su plan de reestructuración
para el 15 de septiembre, se enfrenta a la quiebra.
Cerca de 1.670 empleados se han acogido voluntariamente a planes
de jubilación anticipada.
En los primeros seis meses del año, las ventas de Ssangyong
cayeron el 73,9 por ciento interanual, hasta las 13.020 unidades.
EFE