Bruselas, 4 mar (EFE).- La Comisión Europea aprobó hoy destinar
225 millones al soterramiento de la red de alta tensión entre Baixas
(Perpiñán, Francia) y Santa Llogaia (Gerona) y 45 millones al
gasoducto que unirá España con Francia a través del paso de Larrau.
El proyecto de interconexión eléctrica será llevado a acabo por
Red Eléctrica de España y el Réseau de Transport d'Electricité
francés, mientras que Enagás se encargará del gasoducto de Larrau,
para el que habrá que construir una estación de compresión de gas.
El Ejecutivo comunitario también dio hoy su visto bueno
definitivo a los 175 millones de euros de los que se beneficiará la
compañía francesa GRT-gas que construirá una tubería para el
transporte de gas también entre España y Francia, pero en terreno
francés.
El comisario de energía, Günther Oettinger, destacó que la
financiación de conexiones energéticas entre Francia y España tiene
un doble interés: "Por un lado, para ambos estados miembros, con el
objetivo de crear posibilidades comunes de mercado y solidaridad
mutua".
"Por otro lado, es el punto de partida para soluciones más
amplias. Para conectar Europa con África hacen falta conexiones en
el Mediterráneo, pero también mejores lazos entre los países del sur
de Europa y los del norte", destacó Oettinger.
Estas subvenciones forman parte de los 4.000 millones acordados
en 2009 para proyectos energéticos, dentro del programa de
recuperación económica.
Durante la concesión del primer tramo de estas ayudas, en
diciembre pasado, la Comisión Europea aprobó conceder 180 millones
de euros a un proyecto de captura y almacenamiento de dióxido de
carbono (CO2) en Compostilla (León), en el que participan Endesa y
la Fundación Ciudad de la Energía (Ciuden), dependiente del
Gobierno.
La Comisión Europea ha aprobado hoy el segundo tramo de estas
ayudas, en el que ha asignado 2.300 millones a 31 proyectos en el
sector del gas y 12 del de electricidad, entre ellos los españoles
antes mencionados, que deberán tener terminados los proyectos en un
máximo de cinco años.
"Invertir en infraestructuras esenciales no sólo dará un impulso
a la economía y al empleo, sino que además garantizará que los
hogares de los ciudadanos puedan disponer de calefacción y
electricidad incluso en el supuesto de que el suministro sufra
interrupciones", ha dicho el presidente de la Comisión, José Manuel
Durao Barroso, tras la aprobación de las ayudas.
Precisamente para asegurar el suministro, la CE decidió otorgar
200 millones de euros al gasoducto Nabucco -que permitirá importar
gas de la región del Caspio sin pasar por Rusia-.
La concesión de estos fondos no se hará efectiva hasta que se
apruebe la construcción de Nabucco, que de momento sigue pendiente.
"Estamos enviando un primer mensaje, que ayudará a elaborar el
plan de negocio a los inversores", explicó el comisario de Energía,
quien negó que Bruselas se oponga al desarrollo del gasoducto South
Stream -diseñado para traer gas ruso a través del Mar Negro y
considerado un rival de Nabucco-.
Lo que sí dejo claro Oettinger es que Nabucco, "merece especial
atención de la CE, y también financiera", porque a diferencia de
South Stream, no sólo soluciona la dependencia técnica, sino también
la de tener una única fuente de suministro.
El comisario confía en que se decida sobre la construcción de
Nabucco antes de que finalice este año. EFE