Por Sarah Marsh
BUENOS AIRES (Reuters) - Dos jueces se excusaron el lunes de investigar la denuncia que presentó el difunto fiscal Alberto Nisman contra la presidenta de Argentina y funcionarios de su Gobierno, a quienes acusó de buscar encubrir a los supuestos autores de la voladura de una organización comunitaria judía en Buenos Aires en 1994.
Pocos días después de que Nisman presentara la denuncia contra la mandataria Cristina Fernández, el ministro de Relaciones Exteriores Héctor Timerman y otros dirigentes oficialistas, fue hallado muerto en su vivienda en la capital del país sudamericano con un disparo en la cabeza.
Todavía no está claro si Nisman se suicidó o si fue asesinado. Las misteriosas circunstancias que rodean a su muerte han desatado una tormenta política e infinidad de teorías conspirativas.
El fiscal acusó a Fernández de liderar un complot para encubrir a los iraníes acusados del estallido de la sede de la organización mutual AMIA que dejó 85 muertos en Buenos Aires. Irán siempre ha negado estar relacionado con el atentado.
Nisman creía que hubo un fallido plan secreto entre Buenos Aires y Teherán para "desincriminar" a varios iraníes -sobre los que pesan alertas rojas de Interpol- a fin de restablecer los lazos diplomáticos y comerciales bilaterales.
El 14 de enero Nisman presentó su denuncia ante el juez federal Ariel Lijo porque ya se encontraba investigando una causa por intentos anteriores de encubrimiento en la que se encuentra procesado el ex presidente Carlos Menem, que gobernó Argentina entre 1989 y 1999.
Lijo señaló el lunes en un comunicado que no había suficientes nexos para vincular las dos denuncias dado que los supuestos ilícitos tuvieron lugar en periodos de tiempo diferentes e involucraron a distintas personas.
"Para que sea posible la acumulación de la denuncia al expediente principal (...)(no es suficiente) el simple hecho de que tenga cierta vinculación indirecta o directa con el atentado a la AMIA, como se da en el presente caso", escribió Lijo en el comunicado presentado el lunes para excusarse.
Así, otro juez federal debía tomar la denuncia. Pero el designado por sorteo Daniel Rafecas se declaró incompetente, según publicaron varios medios de prensa locales, y nuevamente la denuncia quedó sin juez a cargo.
La causa pasó ahora a manos de la Cámara Federal, que deberá realizar un nuevo sorteo para definir que juez la lleva adelante.