Atenas, 20 nov (.).- Grecia y sus acreedores -Banco Central Europeo (BCE), Comisión Europea (CE), Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) y Fondo Monetario Internacional (FMI)- retomaron hoy, tras una pausa de tres días, las negociaciones para avanzar en la evaluación en curso del tercer rescate.
Las instituciones y los representantes del Gobierno heleno se verán las caras tres reuniones temáticas, según comunicó el Ejecutivo griego: sobre el mercado laboral -en la que estuvo presente la nueva ministra de Trabajo, Efi Ajtsíoglou-, fiscalidad y educación.
Con respecto al mercado de trabajo hay dos puntos importantes de divergencia entre ambas partes: el primero, el límite a los despidos colectivos, que el Fondo Monetario Internacional quiere que se amplíe; y el segundo, la forma de establecer el salario mínimo, que Grecia quiere que salga del diálogo entre los agentes sociales.
En el tema fiscal el Ministerio de Finanzas aseguró que los acreedores calculan que el presupuesto de Grecia debe recaudar o recortar 50 millones de euros más para alcanzar los objetivos de déficit en 2017, aunque matizó que esto no impedirá presentar las cuentas para el año que viene en el Parlamento el lunes, como estaba previsto.
Para 2018, la diferencia es sensiblemente más amplia, pues las instituciones consideran que en los cálculos del Gobierno griego faltan 600 millones de euros para alcanzar los objetivos de ese ejercicio.
El Ejecutivo griego desea conseguir un acuerdo con sus acreedores antes de la reunión el grupo de trabajo del Eurogrupo el 28 de noviembre.
Esto permitiría que el acuerdo fuera validado por el propio Eurogrupo del 5 de diciembre, en el que Grecia espera asimismo que se trate una posible relajación en los objetivos de superávit primario a partir de 2019 y una eventual reestructuración de la deuda.