Managua, 12 jul (EFE).- Una delegación del Gobierno de Nicaragua
viajó hoy a Washington, donde esperan tratar mañana con el director
gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Dominique Strauss
Khan, el impacto en este país de la crisis económica global, entre
otros asuntos, informó una fuente oficial.
Esa delegación, encabezada por el presidente del Banco Central de
Nicaragua (BCN), Antenor Rosales, dará a conocer a Strauss Khan la
visión que tienen los nicaragüenses sobre el impacto en este país de
la crisis económica y financiera global.
También expondrán la "impostergable necesidad" de continuar
trabajando juntos con el FMI y otros organismos internacionales en
la búsqueda de objetivos para reducir la pobreza y promover las
inversiones, anunció el titular del BCN, previo a ese viaje.
La delegación del Gobierno de Nicaragua que viajó a Washington
está acompañada por representantes de la industria bancaria local
que manifestarán la importancia de contar con los recursos externos
que se requieren para impulsar la disminución de la pobreza en este
país centroamericano.
El Gobierno de Nicaragua espera obtener este año desembolsos por
35 millones de dólares y la asignación de los Derechos Especiales de
Giro (DEG), que corresponden a Managua, por un monto que podría
llegar a otros 35 millones de dólares.
El economista independiente Néstor Avendaño puso hoy en duda que
la delegación nicaragüense consiga esos recursos, debido a que no ha
cumplido con algunas exigencias de ese organismo multilateral.
"El FMI es muy inflexible si hay una pequeña desviación en el
déficit fiscal, en el aumento de las reservas, o en la tasa de
inflación, pero es severamente inflexible cuando no se cumplen las
reformas estructurales", advirtió el economista.
El Gobierno sandinista dijo que las últimas exigencias del FMI,
como eliminar exoneraciones impositivas a instituciones y organismos
no productivos del país, están "fuera de lugar".
El presidente Daniel Ortega denunció recientemente que el FMI
quiere imponer condiciones que suponen "amenazas de muerte" para la
economía del país.
El líder sandinista dijo el 27 de junio pasado que el FMI, al que
llamó "Fondo de la Muerte Internacional", quiere que en su país
desaparezcan las exoneraciones a los sectores sociales, medios de
comunicación, iglesias y organizaciones no gubernamentales.
Según el mandatario, el FMI igualmente quiere que su Gobierno
apruebe "ya" una reforma tributaria, lo que significaría más
impuestos para los nicaragüenses, en medio del impacto de la crisis
económica y financiera global.
Este organismo internacional también desea que las pensiones que
reciben miles de nicaragüenses disminuyan, según Ortega.
Nicaragua plantea que el FMI debe cumplir con lo establecido en
la reunión del G-20 en Londres, en la que se determinó que los
países en dificultades tienen que recibir la ayuda necesaria para
mejorar su situación y hacer frente a la crisis económica. EFE