Londres, 13 feb (EFE).- Una organización progresista británica,
"The New Economics Foundation", ha propuesto reducir la jornada
completa de trabajo a 21 horas semanales para ayudar a recuperar la
economía y mejorar la calidad de vida de los ciudadanos.
En un momento de crisis productiva y de empleo, este "think tank"
de izquierdas publicó hoy un informe en el que se argumenta que
reducir las jornadas laborales derivará no sólo en una mayor
prosperidad económica, sino en una mayor cohesión social.
"The New Economics Foundation" afirma que en el caso del Reino
Unido la gente trabaja hoy más horas que hace 30 años, pese a que el
nivel de desempleo está en máximos históricos y afecta a 2,5
millones de personas (el 7,8 por ciento de la población activa).
El argumento de esta Fundación es que aunque la gente gane menos
al trabajar menos horas se dispondrá de más tiempo para hacer otras
cosas que enriquecen el ámbito personal y a las que, en las actuales
circunstancias, se tiene que destinar buena parte del salario, como
el cuidado de los hijos u otros familiares dependientes.
Además, con una jornada reducida, habría más oportunidades para
prestar servicios a la comunidad, lo que también redundaría
positivamente en la economía y se podría retrasar la edad de
jubilación, lo que supondría un alivio para el gasto público.
Anna Coote, coautora del informe "21 horas", afirmó: "demasiados
de nosotros vivimos para trabajar, trabajamos para ganar dinero, y
ganamos dinero para consumir; y nuestros hábitos de consumo están
acabando con los recursos naturales del planeta".
"Invertir menos tiempo en trabajo remunerado podría ayudarnos a
romper esta pauta. Tendríamos más tiempo para ser mejores padres,
mejores ciudadanos, mejores cuidadores y mejores vecinos", dijo.
Coote argumentó que "incluso nos convertiríamos en mejores
empleados, menos estresados, con un mayor control sobre nuestras
vidas, más felices en nuestros trabajos y más productivos".
Para "The New Economics Foundation" ha llegado la hora de "poner
fin al ritmo marcado por el viejo reloj industrial, recuperar
nuestras vidas y trabajar por un futuro sostenible".
Andrew Simms, directivo de la Fundación, declaró que "un cambio
de mentalidad cultural nos permitirá afrontar desafíos reales" y
consideró que "podría suponer un beneficio masivo para nuestra
economía, nuestra calidad de vida y nuestro planeta".
"Después de decir todo esto, que levante la mano quien este a
favor de un fin de semana de cuatro días", concluyó Simms. EFE