Santiago de Chile, 17 ago (EFE).- El Gobierno chileno dijo hoy
que recibió un informe sobre el incumplimiento de normas de
seguridad en el yacimiento San José emitido el pasado 6 de agosto,
un día después del derrumbe que tiene atrapados a 33 obreros, y
reconoció que debió "tomar acciones" para evitar estas tragedias.
"Después de todos los antecedentes, estamos claros que debimos
haber tomado acciones", sostuvo hoy la ministra del Trabajo, Camila
Merino, con el fin de aclarar los alcances de un informe realizado
por la Dirección del Trabajo tras un accidente en la misma mina el
pasado 3 de julio y que fue revelado el lunes por parlamentarios de
la oposición.
En dicho incidente un obrero resulto herido.
Dicho análisis da cuenta de que las autoridades fueron informadas
del incumplimiento de las normas de seguridad en la mina San José,
donde en la actualidad se trabaja exhaustivamente para rescatar a
los mineros atrapados a más de 700 metros de profundidad, sin que se
sepa si están con vida o muertos.
Tras reunirse con el ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter y
la ministra Portavoz, Ena von Baer, Merino explicó a los periodistas
que, sin embargo, el documento aludido "se elaboró entre el 3 y 29
de julio, y se emitió el 6 de agosto", un día después del derrumbe.
Merino insistió en que el órgano encargado de cerrar o mantener
abierto un yacimiento es el estatal Servicio Nacional de Geología y
Minería (Sernageomin), "es el que tiene las mayores
responsabilidades técnicas", apostilló.
"Cuando se produce un accidente minero como el del 3 de julio
-que en la oportunidad perjudicó al obrero Gino Cortés- la empresa
está obligada a autosuspender las faenas, y quien está facultado
para levantar la suspensión es el Sernageomin", sostuvo Merino.
La ministra descartó que la Dirección del Trabajo estuviera
facultada para clausurar el yacimiento, aunque el ex director
regional del Sernageomin de Atacama, Anton Hraste, aseguró lo
contrario.
"La Dirección del Trabajo sí puede cerrar un yacimiento" e,
incluso, tiene más soporte legal que el Sernageomin para paralizar
cualquier faena minera, recalcó Hraste, quién hoy se presentó
voluntariamente ante la Comisión Investigadora de la Cámara de
Diputados.
Hraste, que clausuró el yacimiento en 2007, afirmó que les avisó
a los dueños de la empresa minera "que el yacimiento no podía ser
reabierto nunca más", misma advertencia que hizo a las autoridades
regionales.
En tanto, el presidente chileno, Sebastián Piñera, anunció en la
región sureña de Aysén "que se realizará una completa revisión y
reformulación de las condiciones laborales en el país", tras el
accidente en el yacimiento San José.
"Necesitamos una completa revisión de estas condiciones en que
trabajan nuestros trabajadores y trabajadoras", explicó Piñera a los
periodistas, y añadió para "asegurarnos que sea un trabajo digno".
"No queremos que en nuestro país sigamos teniendo accidentes como
el que ocurrió en la mina San José", añadió el mandatario chileno,
quien esta noche retornó a Santiago tras una gira por las regiones
de Magallanes y Aysén.
En tanto, los familiares de los mineros atrapados en el
yacimiento San José comenzaron hoy a ingresar al socavón con el fin
de observar en terreno el trabajo de los rescatistas.
Por su parte, el ingeniero Andrés Sougarret, funcionario de la
mina El Teniente, la mina subterránea más grande del mundo y quién
esta a cargo de las labores de rescate, explicó que se analizan
nuevos planos del socavón para establecer alternativas de acceso.
Sougarret reconoció que el trabajo que se comenzó con unas
modernas máquinas traídas desde el extranjero, "es bastante más
lento" que el esperado por los expertos, por lo que se han comenzado
a estudiar nuevas propuestas de acceso al yacimiento situado a unos
40 kilómetros de la ciudad norteña de Copiapó. EFE