Caracas, 8 oct (EFE).- El Gobierno venezolano dijo hoy que
seguirá encarando la secuela de la crisis internacional con mayor
inversión productiva interna, especialmente en los sectores de
alimentos y vivienda, y anunció una próxima reforma en el sector
financiero.
"Quienes estaban esperando (la promulgación de) un paquete
económico tradicional otra vez se quedaron con la guayabera puesta",
dijo el ministro de Planificación, Jorge Giordani, al descartar
devaluaciones u otras medidas ajustadas a "modelos tradicionales".
Ese tipo de medidas, dijo en una rueda de prensa conjunta con el
ministro de Economía y Finanzas, Alí Rodríguez, y el presidente del
Banco Central, Nelson Merentes, siempre es aguardada por quienes
"creen que la realidad se comporta según los modelos que tienen en
la cabeza", subrayó.
Rodríguez insistió a su vez en que "vendrán en el futuro cambios
en el sector financiero" que no especificó.
Se trata de "una idea ya aprobada, pero aún por implementarse"
que en definitiva busca que la banca invierta en la economía real,
agregó.
Al respecto, el presidente Hugo Chávez dijo el pasado 21 de
septiembre que esperaba "un plan" de la banca privada que haga
cumplir su obligación de trabajar conjuntamente con el Gobierno para
el desarrollo del país.
"La banca privada tiene que montarse también el país al hombro y
no al revés", sostuvo el gobernante ese día al advertir que una
actuación orientada solo a lo financiero fue lo que provocó la
actual crisis internacional.
Después de la desaceleración de la economía (contracción del 2,4%
en el segundo trimestre, tras 22 consecutivos de crecimiento), la
aceleración de la inflación (acumulado de 18,5% en el año) y la
diferencia entre la cotización oficial del dólar y la tasa paralela
(el triple), "la intermediación financiera" es el cuatro mayor
problema del país en la actualidad, sostuvo.
La banca privada debe definir cuántos recursos destinará a la
pequeña y mediana industria en créditos, con "tasa de interés con
facilidades", añadió en septiembre, tras insistir que en la
actualidad "no le prestan a la verdadera producción", especialmente
de alimentos.
Rodríguez y Giordani se expresaron hoy en los mismos términos y
añadieron como novedad, aunque asimismo sin detalles, la próxima
creación de un "fondo con recursos de distintas fuentes", entre
ellas los que se capte con la oferta de bonos públicos en el mercado
nacional y el aporte del sistema bancario privado por definirse.
Se trata, en definitiva, admitió Rodríguez, de atacar problemas
estructurales en un país con "una capacidad de compra que supera su
capacidad de producción", e incluso de "eficacia gerencial".
Giordani hizo hincapié a su vez en que se mantendrá la política
de prioridad social impulsada por Chávez, que dijo es reconocida en
informes tales como los del Programa de las Naciones Unidas para el
Desarrollo (PNUD).
El último informe del PNUD sobre el índice desarrollo humano
difundido esta semana colocó a Venezuela en el puesto 58, lo que
refleja que desde el inicio de la gestión de Chávez hace una década
"sube cuatro puestos cada año", sostuvo Giordani.
"Si la economía no va dirigida a la felicidad del ser humano, no
tiene sentido", insistió, tras identificar como meta gubernamental
de corto plazo la recuperación del ritmo de la economía y al menos
el mantenimiento de la actual tasa de empleo nacional.
El Gobierno ha estimado que el PIB se expandirá un 0,5 por ciento
el próximo año, tras cerrar en "al menos cero" este año, y que el
desempleo seguirá en torno al 8% actual. EFE
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