Quito, 12 nov (EFE).- El Gobierno de Ecuador anunció hoy que
reducirá a la mitad el racionamiento de energía al que está sometido
el país desde hace una semana, por el déficit de generación en su
mayor planta hidroeléctrica, Paute, en el sur andino.
Así lo señaló el ministro en funciones de Electricidad y Energía
Renovable, Juan Espinoza, al señalar que esa disposición entrará en
vigor en los próximos días, una vez que ingrese al país una carga
que se comprará a Perú.
"Si se está cortando (la luz) cuatro horas en un sector o en una
ciudad, el corte será de dos horas de aquí en adelante", explicó
Espinoza, al señalar que el fin de semana entrarán en funcionamiento
dos generadoras termoeléctricas, que usan petróleo para operar.
Espinoza dijo al canal Ecuavisa que a ese aporte adicional de
electricidad se sumará la energía que se prevé comprar a Perú, de
unos 50 megavatios.
El convenio, según el ministro, "está aprobado por parte del
Gobierno" peruano, por lo que el contrato se firmaría en breve.
Ecuador se encuentra sometido a una situación de emergencia
eléctrica por la merma en la generación de la central de Paute, que
aporta un 35 por ciento a la oferta de energía del país, debido al
estiaje que afecta el ingreso de agua a su reservorio.
No obstante, Ecuavisa informó de que en las últimas horas se ha
registrado una ligera lluvia en la planta de Paute, lo que ha hecho
subir levemente el nivel del embalse, cuya superficie se encuentra
aún a unos 20 metros por debajo del nivel óptimo para el
funcionamiento de la planta.
Los informes meteorológicos no advierten un aumento de lluvias en
la zona de Paute, especialmente en los sectores aledaños, que
aportan humedad a los cauces de los ríos que alimentan el
reservorio.
Para el presidente de la Cámara de Comercio de Quito, Blasco
Peñaherrera, la crisis eléctrica se mantendrá por algún tiempo,
pues, a su criterio, "no parece que haya una solución en, al menos,
90 días" más.
Si su pronóstico no falla y la sequía afecta el funcionamiento de
Paute en los próximos tres meses, Peñaherrera dijo que, entonces,
que Ecuador va a perder "como nación, como país, todos los
ecuatorianos, 1.800 millones de dólares".
El empresario calcula que los racionamientos de energía alcanzan
el 20 por ciento del consumo habitual en las ciudades y estima que
ello supone pérdidas de 20 millones de dólares diarios.
De su lado, el presidente ecuatoriano, Rafael Correa, remarcó hoy
que el estiaje en la zona sur andina del país es el más grave
registrado en los últimos 40 años.
Correa insistió en que la actual situación es una consecuencia de
la negligencia de gobiernos pasados, que postergaron la construcción
de los grandes proyectos eléctricos que necesita el país y que
recién han empezado a ejecutarse en su administración.
"Las hidroeléctricas no se construyen por decreto" y toman
tiempo, afirmó el mandatario, al recordar que su Gobierno ha
acometido unos once proyectos eléctricos que entrarán en
funcionamiento en los próximos años y que permitirán solucionar el
déficit de generación, a medio y largo plazos. EFE