Los Ángeles (EE.UU.), 12 ene (EFE).- El gigante de Internet
Google amenazó hoy con cerrar sus operaciones en China después de
sufrir un ciberataque proveniente del país asiático dirigido a
cuentas de correo electrónico de activistas pro derechos humanos.
Así lo informó hoy David Drummond, jefe de la división legal de
la empresa, en un blog de la compañía.
Google decidió replantearse su estrategia en China, donde están
presentes desde hace 4 años, al entender que no se están cumpliendo
los objetivos con los que se implantó en el país y que le llevaron a
transigir con la censura gubernamental, a pesar de que este cambio
de rumbo pudiese suponer su salida del país.
"Compartimos esta información sobre los ataques con una amplia
audiencia no solo por las implicaciones de seguridad y derechos
humanos, sino también porque esta información va al corazón de un
debate global mayor sobre libertad de expresión", comentó Drummond.
Google opera desde 2006 en China a través de www.google.cn
mediante un acuerdo firmado con las autoridades para limitar los
resultados de su buscador, una controvertida apuesta realizada "con
la creencia de los beneficios que supondría un mayor acceso a
información para el pueblo chino", apuntó.
"Un Internet más abierto compensaba nuestro malestar producido la
censura", explicó.
Los últimos ataques registrados a mediados de diciembre, con
origen en China, consiguieron abrir una brecha en la infraestructura
de Google y tuvieron como consecuencia el robo de propiedad
intelectual de la empresa y el acceso a cuentas de correo
electrónico de activistas pro derechos humanos chinos que, según la
empresa, "era el objetivo prioritario de los atacantes".
Drummond manifestó que los "hackers" intervinieron, además, los
sistemas de una veintena de grandes empresas, lo que llevó a la
puesta en marcha de una investigación.
Esta investigación desveló que se estaban produciendo accesos
sistemáticos en cuentas de docenas de defensores de los derechos
humanos en China de usuarios en EE.UU., China y Europa por parte de
terceros a través de diferentes programas informáticos de espionaje
y robo de identidad.
"Esos ataques nos llevaron a concluir que deberíamos revisar la
viabilidad de nuestro negocio en China", indicó el directivo.
"Hemos decidido que no queremos continuar con la censura de
nuestros resultados en Google.cn y durante las próximas semanas
discutiremos con el Gobierno chino las bases para que podamos operar
con un motor de búsqueda sin filtros y dentro de la ley", destacó.
Drummond admitió, asimismo, que este planteamiento podría llevar
al cierre de Google.cn y de las oficinas de la empresa californiana
en el país asiático. EFE