Pekín, 23 jun (EFE).- Dos plantas de ensamblaje de la automotriz
japonesa china Honda han vuelto a parar su producción debido a una
huelga en una suministradora de autopartes, un incidente que le
ocurre por tercera vez a la segunda fabricante de Japón en los
últimos dos meses, informó hoy un portavoz de la compañía a Xinhua.
En esta ocasión ha sido un paro de unos 300 empleados en la
empresa japonesa Denso Corp. en Cantón la que ha forzado el parón de
las plantas, también en esa provincia meridional china.
El lunes, día 21, y ayer, martes, los empleados de Denso, muchos
de ellos jóvenes, detuvieron su trabajo para reivindicar aumentos de
sueldo y una mejora de los beneficios sociales.
Los empleados cobran alrededor de 1.300 yuanes al mes (unos 190
dólares) y piden aumentos de entre 800 y 1.000 yuanes mensuales
(entre 115 y 140 dólares).
El paro podría también afectar a Toyota, rival de Honda y mayor
fabricante mundial de automóviles, ya que Denso también le
suministra autopartes.
Honda y Toyota, entre otras compañías, se están viendo afectadas
por una ola de huelgas en fábricas de China para reclamar subidas de
sueldos y mejores condiciones laborales.
Según los analistas, estas protestas están encabezadas por
trabajadores jóvenes que no están dispuestos a aceptar las mismas
condiciones que sus predecesores, que soportaron jornadas de trabajo
interminables y bajos sueldos porque éstos suponían una mejora con
respecto al trabajo en el campo del que venían muchos.
Honda, que ha sufrido los paros de cuatro de sus suministradoras,
ya ha tenido que parar en tres ocasiones la producción de todas o
alguna de sus plantas de ensamblaje en China en mayo y junio,
mientras que Toyota, afectada por huelgas en dos ocasiones, todavía
no ha reportado detenciones de sus factorías principales.
La ola de huelgas se está extendiendo a medida que éstas se van
resolviendo con subidas salariales, por lo que se vaticina que este
descontento de los trabajadores se traduzca en un generalizado
aumento de sueldos en el sector industrial chino, que durante años
se ha caracterizado por bajos sueldos y largas jornadas.
La "fábrica del mundo" china podría dejar de ser rentable para
muchos fabricantes de todo el planeta que actualmente concentran
allí su producción, y los grandes beneficiados podrían ser los
países del sureste asiático, a los que se espera que se trasladen
algunas de las factorías ahora en China, destacan los expertos. EFE