Bruselas, 10 sep (EFE).- Italia mantuvo hoy la reserva que impide
la firma de un histórico acuerdo de libre comercio, ya negociado,
entre la Unión Europea y Corea del Sur.
En rueda de prensa, el presidente de turno del Consejo de
ministros de Comercio de la UE, el belga Steven Vanackere, confirmó
el bloqueo italiano, pero aseguró que los Veintisiete están "muy
cerca del acuerdo" y expresó su esperanza de que la firma pueda
recibir el visto bueno definitivo el lunes que viene.
"Nuestro colega italiano ha expresado sus consideraciones que le
impiden en este momento sumarse al acuerdo; trabajamos en una
redacción que permita la unanimidad, pero esta mañana no ha sido
posible confirmar definitivamente un acuerdo", declaró Vanackere al
término de una reunión de los Veintisiete.
Durante el fin de semana, la presidencia de turno belga, la
Comisión Europea y el Gobierno italiano continuarán las consultas
con el objetivo de que el Consejo de Asuntos Generales, que se
reunirá en Bruselas el próximo lunes, pueda aprobar el punto sin más
debate.
Vanackere indicó que son "tres" los puntos del acuerdo que le
plantean problemas a Italia, los cuales "van a ser considerados muy
detenidamente", aunque no quiso dar ningún detalle para no
interferir en la negociación.
"Veintiséis estados miembros, y yo diría veintisiete, están
convencidos de la importancia histórica de la firma en estos
momentos del acuerdo con Corea", explicó el ministro belga de
Asuntos Exteriores.
"Llegar a un acuerdo el lunes será una señal muy importante no
sólo para Europa sino para el mundo, una señal de que se puede hacer
frente a la crisis económica mediante acuerdos comerciales
satisfactorios", argumentó.
Según fuentes diplomáticas, Italia desconfía del impacto que el
acuerdo de liberalización puede tener sobre su sector del automóvil.
Por su parte, la Comisión Europea (CE) y los demás Estados
miembros, incluidos el resto de los que producen automóviles como
España, consideran que ese posible impacto quedará compensado por
los beneficios generales que obtendrá la economía de la UE por el
aumento de las exportaciones al dinámico país asiático.
Italia ha pedido que la entrada en vigor del acuerdo se retrase
durante un año.
Sus preocupaciones derivan de la desaparición prevista de las
barreras arancelarias a la llegada a Europa de coches surcoreanos de
pequeño tamaño, un segmento en el que la italiana Fiat es uno de los
líderes a escala europea.
Sin embargo, los demás países comunitarios consideran que el
acuerdo incluye condiciones "razonables" para proteger al sector del
europeo del automóvil, como un desarme arancelario muy escalonado
-hasta siete años- y una cláusula de salvaguardia, según explicó una
fuente diplomática.
La CE calcula que, en su conjunto, el acuerdo supondrá un ahorro
de 1.600 millones de euros anuales en aranceles que pagan los
exportadores europeos para llegar al mercado surcoreano, sin contar
las posibilidades de incrementar las exportaciones. EFE