París, 10 may (EFE).- El empresario español Joaquín Rivero ha
sido imputado por la justicia francesa por varias operaciones que
llevó a cabo cuando era presidente de la inmobiliaria francesa
Gecina, que hoy celebra su asamblea general de accionistas en un
ambiente turbulento.
El juez de asuntos financieros Renaud van Ruymbeke responsable de
la instrucción imputó a Rivero el pasado 12 de abril por
malversación, presentación de cuentas inexactas y difusión de falsas
informaciones, entre otros cargos, confirmaron hoy fuentes de Gecina
y de la Asociación de Accionistas Minoritarios (ADAM).
El principal elemento de la instrucción, abierta por la denuncia
presentada por la ADAM "contra X" (sin identificar un presunto
culpable) fue la adquisición por Gecina de la inmobiliaria Bami,
propiedad del propio Rivero y de su socio Bautista Soler.
La presidenta de la asociación, Colette Neuville, explicó a Efe
que podría haber otras personas inculpadas, y subrayó que ella ya
hizo "(su) trabajo" con la formalización de la denuncia, y que ahora
"corresponde a la justicia" hacer su papel.
Neuville recordó que la adquisición de Bami obligó a establecer
provisiones por 183 millones de euros, el valor íntegro de la
compañía.
En la junta de accionistas de esta tarde, la ADAM quiere un voto
de los accionistas contra la compra de Bami porque aunque la
operación ya no se pueda anular, eso permitirá jurídicamente
plantear la responsabilidad de los administradores que la aprobaron.
La asociación también se opone a la entrada en el consejo de la
hija del empresario español, Elena Rivero, por considerar que eso
vendría a reforzar el campo del ex presidente de Gecina, que
conserva un 16% del capital. EFE