Lisboa, 5 may (EFE).- La Bolsa de Lisboa cerró hoy con una caída
del 1,49 por ciento, que situó su principal índice, el PSI-20, en
6.992,30 puntos, aunque se atenuó el fuerte retroceso de la última
sesión.
La Bolsa portuguesa, que acabó en menos de 7.000 puntos por
primera vez desde julio de 2009, registró un día marcado por la
volatilidad del índice, que acabó en negativo arrastrado por la
alerta de Moody's, que avisó de un recorte en la calificación de la
deuda pública lusa dentro de tres meses.
Asimismo, los intereses cobrados a Portugal aumentaron y la
rentabilidad de las obligaciones del Tesoro a diez años avanzaron 32
puntos básicos, por lo que el diferencial entre el bono luso y el
alemán ya está en 290 puntos.
De los 20 títulos que componen el índice, 17 registraron
pérdidas, sobre todo en el sector financiero.
El Banco Espíritu Santo (BES) se dejó el 3,47%; el Banco
Portugués de Inversiones (BPI), participado por La Caixa, el 3,24%;
y el Banco Comercial Portugués (BCP), participado por el Sabadell,
el 2,15%.
La petrolera Galp Energía ganó el 0,96%; mientras que la
eléctrica Energías de Portugal (EDP), que en España controla HC
Energía, se contrajo el 1,78%; y su filial, EDP Renovables, con sede
en España, el 2,48%.
En el sector de las telecomunicaciones, Portugal Telecom (PT),
participada por la española Telefónica y uno de los pesos pesados
del índice luso, cayó el 0,41%.
La concesionaria de autopistas Brisa, participada por Abertis, se
depreció el 0,06%, y la cementera Cimpor, que controla Corporación
Noroeste, el 3,91%. EFE