Madrid, 8 feb (EFE).- La Bolsa española ha pagado demasiado cara
la crisis de solvencia que atraviesa la economía de Grecia, que ha
contagiado a los inversores una desconfianza que no se corresponde
con la solvencia del mercado ni de la economía española, según la
opinión de los analistas consultados por EFE.
El mercado español de renta variable, uno de las que más peso
tienen en Europa, se ha visto afectado por una oleada de pánico que
debería remitir en los próximos días, dado que hay liquidez de sobra
y los indicadores macroeconómicos y, sobre todo, empresariales,
comienzan a mejorar.
El daño causado a la Bolsa española por las dudas que los
problemas de Grecia han dispersado sobre los países de la cuenca
mediterránea, así como el aumento del diferencial entre el bono
alemán y el español y el incremento en los seguros contra la
suspensión de pago de deuda o CDS (Credit Default Swaps) debería
dejar paso, a medio plazo, a una sólida recuperación bursátil.
La minicrisis vivida la semana pasada en la Bolsa española,
durante la que su principal indicador perdió el 7,71 por ciento,
respondió más al pánico de los inversores que a un peligro real de
falta de solvencia del Estado, tal y como explica Pedro del Pozo,
analista de Fortis BNP Paribas.
Tanto a nivel global como en la zona del euro hay, más que
"brotes verdes", mejoras objetivas, y en el caso de España el
analista pone como ejemplo las saneadas cuentas de algunas de las
grandes empresas cotizadas.
Los analistas consultados por EFE señalan que los problemas por
los que atraviesa la economía griega -su déficit rozó el 13 por
ciento del PIB en 2009- ha contagiado de desconfianza a los
inversores, que han castigado injustamente el mercado español.
A ello se ha sumado el hecho de que los seguros contra la
suspensión de pago de deuda o CDS se han disparado y alcanzaron el
jueves su máximo histórico en 170 puntos, aunque hoy retrocedían
hasta 165.
Esto supone que la prima de riesgo se incrementa un 1,7 por
ciento, con lo que el mercado español pierde atractivo si se compara
con Alemania, donde es del 0,45 por ciento, o la media de la zona
del euro, del 0,80 por ciento.
No obstante, este indicador aún se encuentra lejos de los 225
puntos de Portugal o los 406 de Grecia.
Además, el diferencial entre el bono alemán, el más solvente de
Europa, y el español se ha incrementado en las últimas semanas hasta
cerca de 100 puntos básicos, otro indicio de la elevada prima de
riesgo que perciben los mercados por invertir en España.
Desde el departamento de análisis de Bankinter explican que el
riesgo de que alguna de las economías del sur de Europa caiga en
quiebra técnica es altamente improbable, aunque "no absolutamente
descartable".
La receta de Bankinter, que parecen haber seguido al pie de la
letra los inversores, consiste en reducir exposición a activos de
bolsa.
Desde Barclays Capital indican que, si bien parece evidente que
la situación española no es tan mala como la griega, el eventual
rescate que podría abordar la Unión Europea tendría como efecto
debilitar al conjunto de la zona del euro.
El analista de Fortis BNP Paribas recuerda que este riesgo afecta
sobre todo a las grandes corporaciones, como Santander, Telefónica o
BBVA, que además son las que, dada su enorme capitalización
bursátil, marcan la evolución del principal indicador de la Bolsa
española, el Ibex-35.
No está en juego la solvencia de España sino más bien su
credibilidad, explica del Pozo, aunque desde Bankinter matizan que
los inversores están esperando medidas decididas por parte del
Gobierno español. EFE