Redacción de Economía, 28 abr (EFE).- El diferencial del bono
griego con el alemán ha superado hoy los 800 puntos básicos,
situación que los mercados europeos han acogido negativamente y ha
depreciado el euro, mientras la Comisión Europea descarta una
reestructuración de la deuda helena.
Durante la sesión matinal, el diferencial del bono griego con el
alemán, el de referencia en Europa, llegó a tocar los 816 puntos
básicos, para estabilizarse en torno a los 809, lo que coloca la
rentabilidad de la deuda soberana del país mediterráneo en el 11,4%.
La incertidumbre en los mercados sobre el futuro de Grecia ha
disparado la rentabilidad de la deuda griega con dos años de
vencimiento hasta el 18,4 por ciento, según cifras del Commerzbank.
El euro, la moneda única europea, se mantenía a mediodía
alrededor de los 1,32 dólares, el nivel más bajo desde hace un año,
debilitado por las dudas sobre la solvencia de Grecia y el temor de
contagio a otros países europeos.
El euro se cambiaba hacia las 11.00 horas GMT a 1,3200 dólares,
frente a los 1,3206 dólares de la apertura y los 1,3313 dólares de
ayer por la tarde, en la negociación de divisas europeas.
Este nuevo varapalo para las finanzas griegas se produce un día
después de que la agencia de calificación de riesgo Standard &
Poor's (S&P) rebajara la calificación de la deuda soberana a la
categoría de "bono basura", hecho que provocó el desplome de las
bolsas europeas.
El gobierno de Yorgos Papandréu se ha reunido hoy con carácter de
urgencia para evaluar la situación financiera, ante las versiones
que circulan en los mercados de que el país podría declararse en
quiebra si no consigue pagar a tiempo la deuda soberana.
Las bolsas europeas mantenían a las 11.00 horas GMT las pérdidas
con las que abrieron, encabezando los descensos Madrid (2,51%),
seguida por Milán (2,08%), Lisboa (2,01%) -que llegó a perder el
6,19% dos horas después de la apertura-, París (1,49%), Fráncfort
(1,47%), Atenas (0,76%) y Londres (0,52%).
También los mercados asiáticos acusaron la repercusión de la
crisis griega, cosechando pérdidas en torno al 1% - 1,5%, con
excepción de Tokio, que cayó el 2,56%.
La Comisión Europea, mientras tanto, indicó que "no es una
opción" la reestructuración de la deuda griega, puesto que no forma
parte de las actuales negociaciones que mantiene en Atenas el
gobierno de Papandréu con la propia comisión, el Banco Central
Europeo y el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Según comentó el portavoz comunitario de Asuntos Económicos y
Monetarios, Amadeu Altafaj, la cuestión de una reestructuración de
la deuda griega, evocada cada vez con más fuerza por los mercados,
"está fuera de lugar" porque los países miembros de la zona del euro
"lo han decidido así".
Paralelamente, la Comisión hizo un llamamiento inusual a las
agencias calificadoras para se comporten de forma "rigurosa y
responsable" sobre la crisis griega.
En Tokio, donde se reúnen con las autoridades japonesas, los
líderes de la Unión Europea (UE) aseguraron que Grecia recibirá "a
tiempo" la ayuda financiera que necesita para hacer frente a su
situación y preservar la estabilidad de la zona del euro.
El presidente de la Comisión, José Manuel Durao Barroso, confirmó
que "no más tarde del 10 de mayo" los jefes de Estado o de Gobierno
de la zona del euro se reunirán en una cumbre para aprobar el
rescate a Grecia.
Barroso dijo que las negociaciones que llevan a cabo en Atenas
progresan de forma "sólida" y se concluirán a tiempo para la cumbre.
EFE