Bruselas, 10 feb (EFE).- La Comisión Europea (CE) está a punto de
proponer un veto al comercio internacional de atún rojo -que se
negociará en una reunión mundial en marzo- porque la nueva comisaria
europea de Pesca, la griega María Damanaki, acepta esa medida,
informaron hoy a Efe fuentes comunitarias.
Damanaki es favorable a que se prohíba la comercialización
exterior del atún rojo en la sesión que celebrarán los miembros de
la Convención del Comercio Internacional de Especies Amenazadas de
Fauna y Flora Silvestres (CITES) entre el 13 y el 25 de marzo en
Doha (Qatar), según las fuentes.
La posición de la nueva comisaria "abre el camino" para que
Bruselas proponga formalmente en los próximos días esa restricción,
ya que hasta ahora había discrepancias entre los distintos servicios
de la CE y las reticencias procedían precisamente de la dirección de
Pesca del Ejecutivo comunitario.
En concreto, se trata de apoyar una iniciativa que promovió
Mónaco para incluir a ese pez en el Anexo I del convenio CITES, lo
que en la práctica impediría la comercialización internacional del
atún rojo pero no su pesca.
Damanaki es partidaria de clasificar al atún rojo en el Anexo I
"pero siempre que haya medidas de apoyo en favor de la flota
artesanal" que podría estar afectada, según las fuentes.
Para que la CE haga pública su propuesta deben presentarla
Damanaki y el nuevo comisario europeo de Medio Ambiente, el esloveno
Janek Potocnik.
Pero al despejarse el camino es previsible que Bruselas la
presente esta misma semana, mañana o el viernes.
En Estrasburgo (Francia), el pleno del Parlamento Europeo ha
pedido que se prohíba el comercio internacional del atún rojo en un
dictamen aplaudido por los ecologistas.
La mayoría de los eurodiputados españoles se han pronunciado en
contra de esa restricción excepto ICV-Los Verdes, que la apoya.
España es el país comunitario que tiene más cuota de pesca de
atún rojo, con un cupo de 2.526 toneladas para 2010 (la UE tiene un
total de 7.104 toneladas).
Entre los países de la UE con intereses en ese recurso, Francia e
Italia han anunciado en los últimos días su cambio de posición y han
respaldado la prohibición, aunque en el caso francés con una
moratoria de 18 meses y ayudas para las flotas artesanales.
España ejerce ahora la presidencia de turno de la UE y e indicó
no hará pública una posición hasta conocer la opinión de la CE; en
cualquier caso insistió en que seguirá "lo que digan los informes
científicos". EFE