Londres, 14 jul (EFE).- El plan de la petrolera BP de lograr una
importante desgravación fiscal por los costos del derrame en el
Golfo de México ha provocado indignación entre los diputados
laboristas del Parlamento británico.
El diputado laborista John McDonnell dijo a "The Times" que
preguntará al ministro de Hacienda, John Osborne, qué subvenciones
fiscales va a recibir BP y qué justifica el que una empresa privada
sea rescatada así por el erario público.
De acuerdo con las leyes británicas y de EEUU, BP tiene derecho a
reclamar una desgravación fiscal por prácticamente todo el costo del
desastre ecológico causado en aguas del Golfo.
Según Richard Murphy, contable de la organización Tax Research
UK, el actual sistema "es extraordinariamente generoso" con BP, ya
que de hecho van a ser los contribuyentes quienes la rescaten por
algo de lo que sólo la empresa es responsable.
El también diputado laborista Jim McGovern ha expresado también
su preocupación por el hecho de que vayan a ser los contribuyentes
británicos quienes carguen con parte de la responsabilidad por lo
ocurrido.
"La imprudencia de BP ha causado un daño inimaginable al Golfo de
México y a las vidas de millones de personas que viven en sus
costas, y ahora amenazan con aumentar aún más la ya pesada carga del
contribuyente británico", criticó McGovern, quien instó al Gobierno
de Londres a evitar que ello ocurra.
BP pagó el año pasado 8.400 millones de dólares de impuestos en
todo el mundo por los beneficios obtenidos, de ellos unos 1.420 en
el Reino Unido y una cantidad similar en Estados Unidos.
Según el Financial Times, BP podría terminar pagando unos 10.000
millones de dólares menos en concepto de impuestos en los próximos
cuatro años debido a los costes en los que ha incurrido por el
derrame del Golfo.
El dinero que BP dedique a clausurar el pozo, a la limpieza del
petróleo vertido y a compensar a los damnificados por la catástrofe
podrá descontarlo de los impuestos, según los contables de la
compañía.
Únicamente las sanciones que puedan imponerle las autoridades
estadounidenses por el vertido no serán desgravables.
La compañía tendrá que hacer frente a importantes obligaciones,
que los analistas estiman que podría llegar a 50.000 millones de
dólares, dice el periódico.
Pero si BP logra cerrar finalmente el pozo para agosto, como
espera, los expertos creen que el derrame le habrá costado unos
30.000 millones de dólares: 10.000 millones en operaciones de
limpieza y el resto en daños y perjuicios a los afectados de la
región.
Dada una tasa impositiva del 33 por ciento en los beneficios, la
los impuestos que tendría que pagar se reducirían en unos 10.000
millones de dólares a consecuencia de la desgravación a que tendría
derecho. EFE