Londres, 3 jun (EFE).- La segunda fase de cinco días de huelga
convocada por el personal de cabina de British Airways (BA) llega
hoy a su fin sin que se haya llegado a un acuerdo entre la dirección
de la compañía y representantes del sindicato Unite.
Por ello, la tercera fase de cinco días de huelga está previsto
que comience este sábado y los representantes de los trabajadores
han amenazado con iniciar nuevos paros durante julio.
La última reunión entre ambas partes se celebró el pasado martes
sin que llegaran a un acuerdo sobre los despidos previstos por la
dirección de la empresa y por el deterioro de las condiciones
laborales, asuntos que centran el malestar de los trabajadores.
Además el sindicato Unite ha pedido a la dirección de BA que
restablezca las ayudas de viajes para el personal y que ponga fin a
las acciones disciplinarias.
Cada día de huelga supone para la compañía unos costes de 7
millones de libras (8,36 millones de euros), aunque BA asegura que
cada vez más trabajadores están abandonando los paros y volviendo al
trabajo.
Ante esta situación, la dirección de BA ha asegurado que para las
próximas jornadas de huelga -que comienzan el sábado- la aerolínea
transportará a más de las tres cuartas partes de los pasajeros que
tienen reservado un billete para esas fechas.
Además, esperan operar todos los vuelos previstos con dirección
Sudáfrica con motivo del Mundial de Fútbol.
Estos vuelos se incluyen en el 80 por ciento de los de larga
distancia a los que la compañía pretende dar salida desde el
aeropuerto londinense de Heathrow la próxima semana, frente al 70
por ciento que salieron esta semana.
La aerolínea también ha anunciado su intención de operar el 60
por ciento de las rutas de corta distancia desde este aeropuerto,
frente al 55 por ciento de la presente semana.
Los vuelos procedentes de los aeropuertos de Gatwick y London
City seguirán sin sufrir cancelaciones. EFE