Londres, 7 may (EFE).- La libra esterlina acabó resentida en los
mercados de divisas, al cambiarse a 1,4666 dólares y 1,1604 euros,
tras concluir hoy el recuento de las elecciones generales celebradas
el jueves en el Reino Unido, en las que ningún partido consiguió la
mayoría absoluta.
Al cierre de la sesión, la libra perdió un 1,77 por ciento
respecto del dólar y un 1,13 por ciento respecto del euro.
La "City" (centro financiero) londinense, partidaria de una
victoria clara del Partido Conservador que diese al Reino Unido un
gobierno fuerte, vio confirmados sus temores de que el país pudiera
tener un "Parlamento colgado" -sin una mayoría clara- por primera
vez desde 1974.
El líder del Partido Conservador, David Cameron, consciente de la
parálisis que puede generar esta situación, se apresuró a hacer una
oferta "global" de gobierno al Partido Liberal Demócrata de Nick
Clegg, tercera fuerza del país.
Clegg podría ser quien tuviera la llave del futuro gobierno
puesto que el líder laborista y todavía primer ministro, Gordon
Brown, también le ha ofrecido un pacto en caso de que no
fructifiquen las negociaciones con Cameron.
Ante esta situación, la libra, que llegó a bajar un 2 por ciento
durante la mañana de hoy, hasta los 1,45 dólares y los 1,14 euros,
recuperó parte del terreno perdido tras la promesa de los
principales líderes políticos de actuar por "el interés nacional".
Antes de que Cameron le tendiera la mano, Clegg ya se había
pronunciado al señalar que los conservadores debían ser los primeros
en intentar formar gobierno porque han sido la fuerza más votada.
Los conservadores son los que tienen un plan más claro e
inmediato para atajar el déficit británico, que este año alcanzará
los 178.000 millones de libras (204.800 millones de euros), por lo
que el suyo era el programa económico que más convencía en la
"City".
Los responsables de los mercados de divisas advirtieron de que la
incertidumbre política seguirá perjudicando a la libra, que hoy
volvió en algunos momentos a los niveles de abril de 2009 frente a
la divisa estadounidense.
Phil Hughes, de Currencies Direct, manifestó a la agencia local
PA que "si no ocurre pronto algo claro y decisivo las consecuencias
podrían ser una venta generalizada de la libra y una eventual rebaja
de la calificación crediticia del Reino Unido".
Sin embargo, dos de las principales agencias de calificación de
riesgo, Moody's y Standard&Poors, señalaron que la falta de una
mayoría clara en las elecciones no afectará a la baja a la
calificación de la deuda de la economía del Reino Unido.
El vicepresidente del Grupo de Riesgo Soberano de Moody's, Arnaud
Mares, consideró que las diferencias entre las políticas fiscales de
los tres principales partidos "son menores", por lo que confió en
que el próximo Gobierno pueda lograr un apoyo parlamentario
suficiente para impulsar planes de ajuste fiscal, como los
propuestos durante la campaña.
Esto tranquilizó a los inversores de la "City", nerviosos desde
que ayer esta misma agencia advirtiera de que la calificación de los
bancos griegos podría contagiar a las entidades de Portugal, España,
Italia, Irlanda y del Reino Unido.
La debilidad de la libra también suscitó temores sobre un posible
repunte de la inflación, lo que podría llevar al Banco de Inglaterra
a revisar al alza las tasas de interés, estancadas en el mínimo
histórico del 0,5 por ciento desde hace más de un año. EFE